Diario las Américas Newspaper, March 12, 1954, Page 2

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“DIARIO LAS AMERICAS” “Miami, Fla., Viernes 12 de Marzo de 1954. Editado G. A. SAN ROMAN Presidente FRANCISCO AGUIRRE Vice Presidente y Editor Rafael Maldonado Sanchez Jefe de Redaccion por THE AMERICAS PUBLIS¥NG COMPANY S. SMITH Vice Presidente HORACIO AGUIRRE Director y Gerente William H. Scharrer Jefe del Dept. de Circulacién ;CRIPCION ASHINGTON, D. C., LLAMAR A LAS OFICI- SRICAS’, TELEFONO: RE-7-7415 SUITE 910, 1001 HINGTON 6. D. C. Editor Press. Departamento de Anuncios para los ro a cargo de Joshua B. Powers, Inc., Miami Office: 15 Chamber of Commerce Bldg., Teléfono 3-3174. Servicios United Pre: Estados Unidos y el ext Robert C. Bevis & Co. ‘al, $6.50. Tri- Jnidos, México mplar domini- YES por correo ordinario, Anual $12.00. Semet mestral, b aéreo para los Estados y Canada, $3/60 adicionales por mes. Ejemplar suelto 5 cts. E; eal 10 cts. Fuera de Miami y sus alrededores 10 y 15 centavos. 4349 — 36th STREET MIAMI SPRINGS. FLA, MIAMI, FLA., VIERNES 12 DE MARZO DE 1954. SUSCRIPCIO; $3.90, TELEFONO: 88-7521 ————— LA PROXIMA ELECCION DE FLORIDA Y EL CENTRO INTERAMERICANO DE MIAMI Han comenzado ya con gran fuerza las campa- fias de los diferentes candidatos para terminar el periodo de Gobernador que quedara inconcluso con la muerte del ilustre Dan McCarty. Las platafor- mas politicas circulan ya con entusiasta profusion por todos los ambitos del Estado. Hay conciencia electoral y las promesas de porvenir tratan de con- quistar seguidores para unos o para otros de los candidates. _, En entrevista exclusiva para Diario Las Amé- fis, 1a cuxl aparece en nuestra ediciénade hoy, el Congresista Bob Sikes, de Crestview, Florida ha hecho hincapié en la realizacién del Centro Inter- americano de Miami, proclamandolo como una im- periosa necesidad del Estado de Florida. El andlisis del Congresista Sikes esta inspirado en la urgencia de robustecer las vinculaciones culturales y comer- ciales de Florida con la América Latina. Sus puntos de vista fayorecen a los electores de Florida que necesitan incrementar sus posibilidades econdmicas mediante el desarrollo de oportunidades que hasta aqui se han desperdiciado en gran parte por falta de un organismo central que retina el esfuerzo de va- rias entidades floridianas y latinoamericanas. Florida no puede abandonar las posibilidades de desarrollar su privilegiada posicién geografica. La politica del Estado no puede ser indiferente a los intereses internacionales —por Ilamarles asi— de los hombres de cultura y de negocios que son pre- cisamente los que fortalecen el presupuesto de Flo- rida. Los millares de votos hispanoamericanos de este Estado pesan lo suficiente como para que se considere el anhelo que ellos sustentan en el sentido de estrechar las vinculaciones entre las patrias de sus antecesores y la tierra de sus hijos mediante el esfuerzo de Florida. Por muchos afios se ha discutido la urgencia de desarrollar el programa Interamericano de Miami, pero atin no hemos Ilegado a su cristalizacién. Qui- zas éste sea el momento para que los candidatos a Gobernadores del Estado reconozcan ese proyecto como fundamental, y cada uno ofrezca no sélo inte- resarse en él, sino darle vida al Centro Interameri- eano de Miami. En esa forma no solamente com- placeran a un fuerte conglomerado de electores, sino que también contribuiran al enriquecimiento de Florida. Seria una promesa que al cumplirse Inter- americanizaria, por asi decirlo, el nombre de una Administraci6én para siempre. Con todo el respeto que nos merecen los candi- datos a la Gobernacién del Estado nos permitimos sugerirles que todos incluyan en su plataforma el capitulo relacionado con el desarrollo de la poten- cialidad cultural y comercial de Florida a través del CENTRO INTERAMERICANO DE MIAMI. Sinceramente creemos que tal paso seria de incon- mensurables beneficios para todos. Subscribase al “Diario Las Américas' Para entregas a domicilio, llamar al Teléfono: 88-7521. Extensién 16 Ud. Recibird su periédico en su propia casa momentos después de que éste entra en circulacién. EL CARROUSEL DE WASHINGTON DREW PEARSON Las Pequefias Lineas Aé- reas sin Oportunidad de Operar El Senador Ferguson De- siste de Investigar las tacticas de McCarthy El senador Ferguson, de Michi- gan, presidente de la poderosa comisién politica republicana del senado, tenia un aire de impor- tancia cuando anuncié la revisién del procedimiento empleado en las investigaciones senatoriales. Hasta llegé a decirle a los perio- distas que tal decisién apuntaba hacia los métodos del senador Mc- Carthy, y era cosa sabida que el Presidente era partidario de la misma, Sin embargo, el simpatico sena- dor por Michigan no es de los hombres que muestran gran deter- minacién cuando estan en el can- delero, segun la opinién de sus co- legas. En una ocasién anterior, cuando era presidente de la comi- sién que ahora dirige McCarthy, Ferguson dejé saber que investi- garia las especulaciones que esta- ba realizando el senador Elmer Thomas, de Oklahoma, un demé- crata que se valia de su alta posi- cién en la comisién senatorial de agricultura para especular con el algodén y otros productos agrico- las. Y a pesar de que comenzé las investigaciones, las abandond repentinamente. Su cambio de actitud tuvo lu- gar después de recibir una carta del senador Thomas — publicada en esta coiumna — en la cual Thomas le decia que se habia en- terado de ciertos favores que habia recibido la familia de Ferguson de parte de la compafia Chrysler, de Detroit. Después de recibir la carta de Thomas, el senador por Michigan no dijo nada mas sobre las in- vestigaciones de las actividades del senador por Oklahoma. A pesar de que Ferguson co- menz6 con mucha alharaca las in- vestigaciones de las tacticas de McCarthy, ahora ha decidido tran- quilamente que cualquier reforma de las comisiones debera ser de “mutuo consenso”. Actualmente, el senador Ferguson esta de acuer- do con el proceso de llamar a los presidentes de las comisiones se- natoriales para pedirles que se ajusten a las disposiciones legales. En otras palabras, la comisién politica republicana sélo esta ape- lando a los mismos presidentes de las comistones. senatoriales que han sido culpables de abusos co- metidos en el pasado. No se adop- tara ningtin acuerdo o legislacién que modifique las investigaciones senatoriales, El Senador Smathers Ata- ca a la Comisién de Aviacién Civil El joven y agresivo senador por la Florida, George Smathers, le creé una situacion tan dificil los otros dias a la Comisién de Avia- cién Civil, en una sesidn a puer- tas cerradas, que el senador John- son tuvo que saltar de su asiento y correr a defenderla. Smathers dijo que la Comisién, que deberia proteger los intereses plblicos, parecia que estaba pro- tegiendo las grandes lineas aéreas al destruir a las mas pequefias. Johnson se disgusté tanto con los alegatos de Smathers, que dijo abruptamente: “Quiero felicitar a la Comisién por la forma en que ha trabajado en el pasado. Los in- tereses ptblicos constituyen su meta, su objetivo y su propésito”. Sin embargo, lo que Smathers sefalé fué que las pequeifias lineas aéreas no pueden sobrevivir sin un certificado de la Comision, y en este sentido le pregunté al presi- dente, Chan Gurney, si se habian expedido certificados de porteado- res desde que él ocupa esa posi- cién. “No que yo me acuerde” contes- té Burney, que ha sido miembro de la Comtsién desde 1950. “:Podria decirme cuantos afios hace desde que se le dié un cer- tificado a un porteador?” pregun- t6 el senador por la Florida, “A los Tigres Voladores y a la Slick Airways se les dié certifica- dos para transportar carga aérea.” “En los ultimos diez o doce anos, se le han dado certificados a algunas lineas autorizandolas a transportar pasajeros por las rutas principales?” inquirié Smathers. . “La unica linea que podria con- siderarse en tal posicién es la Trans Pacific”, contesto Gurney. “Y esa linea no toca en Hawaii” Je recordé Smathers. “Es un hecho —persistié Sma- thers— de que actualmente hay menos lineas aéreas en operacién —lineas en posesién de certifica- dos— que las que habia hace ocho © diez afios.” Gurney explicé que la Comisién debe tomar en consideracién la responsabilidad econémica de la compafia antes de expedir los cer- tificados. “Si la politica de la Comisién es darle los certificados a las perso- nas con la cuenta de banco més grande y el mejor equipo —sefia- 16 Smathers— est4 bien claro para mi de que no hay la mas remota posibilidad de que las nuevas com- pafiias que los soliciten puedan ob- tenerlos.” Presidente, Coronel Marcos Pérez Jiménez Una Historica Alocucién Ante La Conferencia Sefores Representantes de las Reptblicas Americanas: En la oportunidad de inaugurarse la Décima Conferencia Interamericana interpreto un sentir colectivo al presentaros el saludo deferente y cor- dial del Gobierno y del pueblo venezolanos. Bien podriamos afirmar que esta Asamblea de las naciones de América, al igual que las que la han precedido, es eco del pensamiento y de los ideales que para el Nuevo Mundo expresaron y pu- sieron en accién venezolanos antepasados. Desde los dias de la gestacién de nuestras nacionalidades se hizo presente en el credo de’ Francisco Miranda el primer proyecto de unidad continental; pero los intentos de aquél a quien la posteridad ha calificado como el Precursor por antonomasia, asi como los de otros precursores, necesitaron de la mistica y del esfuerzo constante de la generacién de realizadores, quienes consi- guieron lo que a los primeros no les fué posible, El supremo exponente de la generacién de realizadores, Simon Bolivar, el Libertador, entre- tanto demostraba su extraordinaria facultad de creador de nacionalidades, difundia por América la tesis de la unidad continental. A su vez, desde la naciente Republica de Chile, el austero Andrés Bello dictaba catedra de idénticos principios. Y no sdélo con estos nombres, que ocupan puesto eminente en la historia de la libertad y de la civilizacién, podemos destacar la contribucién de Venezuela a la unidad continental. También esté el hecho de que los venezolanos en armas nunca hollaron el suelo de otras patrias en son de conquista, pues fueron a ellas inicamente en cru- zada emancipadora, a ofrendar sus vidas por la mas noble causa a que jamas pueblo alguno se ha- ya consagrado. América fué para Simon Bolivar el vasto es- cenario de sus dos grandes ideales: el de la libera- cién de pueblos y el de su unificacién. Desde los comienzos de su vida publica, en los reveses e in- certidumbres de los primeros afios de la indepen- dencia, durante los dias del esplendor y aun en la hora critica del ocaso, Bolivar mantuvo tenaz- mente el propésito de la unidad continental, con- vencido de que lo conquistado en los campos de batalla seria mas permanente e indestructible me- diante la confederacién de los pueblos americanos. El Congreso de Panama de 1826 es la culmi- nacién de las aspiraciones manifestadas por Boli- var durante la misién diplomatica a Londres en 1810; en la memoria de Cartagena de Indias en 1812; en la célebre circular que dict6 a su Secre- tario de Relaciones Exteriores, Mufoz Tébar, en 1814; en la Carta de Jamaica en 1815; en Angostura en 1818, cuando respondié a Pueyrredén el saludo que éste le envié a nombre de las Provincias Uni- das del Plata; en Cucuta en 1821, con motivo de las instrucciohes que junto con su Ministro de Re- lJaciones Exteriores, Pedro Gual, impartidé a Mos- quera, nombrado Plenipotenciario en el Pert, y en los tratados celebrados con Chile en 1822, con el Pert en el mismo afio, con México en 1823 y con las Provincias Unidas del Centro de América en 1825. No obstante su fracaso, aquel Congreso sigue siendo la expresibn mas concreta de ese gran ideal de Simén Bolivar, que continua vigente por haberlo basado sobre hechos ciertos y constantes, y concebido con indiscutible amplitud de criterio para toda la América. La existencia de factores basicos comunes de tipo continental y el empefio en obtener y preser- var la independencia, fueron las razones funda- mentales por las cuales aparecié casi simultanea- mente en la mayor parte de los pueblos de la América la idea de unidad entre ellos. Junto a esos factores comunes se presentaban caracteristicas especificas y particularidades re- gionales, que iban definiendo a las nuevas nacio- nalidades. Los conquistadores no hallaron iguales condiciones en los diversos lugares de la América; tampoco hubo un mismo asentamiento de la cul- tura que ellos trajeron, ni después han seguido exacta trayectoria los paises americanos en el proceso de consolidacién de sus respectivas nacio- nalidades, aun cuando en tal proceso hayan exis- tido algunos aspectos afines. Todo ello hace que cada una de estas naciones tenga su propia histo- ria, cuente con glorias y fracasos suyos y sea duefa exclusiva de la responsabilidad de su destino. Al producirse la independencia surgié el deseo de sustituir la unidad derivada de la dependencia de hecho, en la cual estuvimos durante siglos, por otra, resultante del cabal entendimiento entre na- ciones libres. La fuerza poderosa de los anhelos humanos concretados en un ideal hace posible, por lo tanto, establecer una unidad integrada con elementos ma- teriales y el propésito espiritual de la confraterni- dad. Razones histéricas nos conservaron obligato- riamente vinculados en la época de la dependen- cia; razones histéricas impusieron la colaboracién y la ayuda mutua de pueblos del Continente en los dias de la independencia, y razones permanentes nos llevan hoy a reconocer la importancia de adop- tar un sistema que, respetando lo que de propio y particular haya en cada uno, nos mantenga uni- dos por nuestra voluntad. La unidad de nuestras naciones no debe pro- ducir por ningun respecto la confusion de sus in- dividualidades ni ser motivo para el predominio en cualquier forma de una o unas sobre las otras. La unidad de nuestros pueblos debe basarse en la comprension, el sentido de asistencia reciproca y el respeto mutuo. Nos comprenderemos mejor si procedemos con sinceridad al estudiar y al resolver los pro- blemas que nos atafien colectivamente; si forta- lecemos el principio de la solucién de las contro- versias por las vias pacificas y perfeccionamos el correspondiente sistema de aplicacién; si no adul- teramos nuestra propia realidad con 4nimo de sor- prender a los de fuera, y si no contribuimos a que la opinién publica de nuestros paises forme criterio erréneo acerca de Ja vida de otros pueblos. Aplicaremos a cabalidad el sentido de asisten- cia reciproca con la superacién, a base de pro- greso espiritual y material, de nuestras condicio- nes nacionales, que no tenga como unico fin el me- joramiento de éstas, sino también, el de disponer de medios que nos permitan concurrir efectiva- mente a la cita de la confraternidad cuando alguno ‘ de nuestros pueblos reclame la presencia de nues- tro auxilio; con propender a nuestro desarrollo in- tegral en armonia con el de América, y, por con- siguiente, en forma que no tienda a lesionar a los otros pueblos; con darle al intercatnbio econémico la amplitud del beneficio entre las partes. en lu- gar de circunscribirlo a miras egoistas de provecho unilateral; con hacer que prevalezcan los superio- res intereses comunes de nuestras naciones sobre las pretensiones de grupos; con poner al servicio de quienes los requieran los resultados de nuestra experiencia en la solucién de determinados proble- mas y las ventajas técnicas de que dispongamos; con mantenernos en guardia para contrarrestar cualesquiera fuerzas antiamericanas, muchas ve- ces encubiertas en propdsitos aparentemente jus- tificados, y con el empefio de contribuir para que los paises de América, dentro de sus naturales pro- porciones, no se clasifiquen en poderosos y débi- les y para que la comunidad de su fortaleza ga- rantice la preservacién de la paz. Nos respetaremos mutuamente cuando no pretendamos imponer nuestro criterio a los otros; cuando no nos creamos autorizados, en nombre de doctrinas que profesemos o que digamos defender, a tomar parte en la politica interna de los demas, pues tal modo de intervenir, en vez de favorecer el acercamiento entre los paises, lo obstaculiza con barreras de disgusto y suspicacia; cuando lle- guemos a la conviccién de que cada uno, dentro del acatamiento a los principios de filosofia po- liticea que son de la esencia constitucional ameri- cana, esta en el derecho de adaptar su sistema de gobierno a las peculiaridades de su evolucién y desarrollo; cuando entendamos que no se puede aplicar por igual postulados politicos o cenir a un patrén invariable formas de gobierno necesaria- mente distintas, en pueblos que con semejanzas de indole general se diferencian en lo particular, y cuando, en fin, los estadistas de nuestras naciones fijen adecuadamente como norma para sus patrias el sabio precepto del Libertador de que “el siste- ma de gobierno mas perfecto, es aquél que produce mayor suma de felicidad posible, mayor suma de seguridad social, y mayor suma de estabilidad po- litica”. Es indispensable insistir en estos planteamien- tos derivados del analisis de los hechos, porque si aspiramos a construir algo practico y estable de- bemos fundamentarnos en la realidad, a fin de evitar que los proyectos fracasen por carecer de tan imprescindible condicién. Teniendo como base la realidad, y como ob- jetivos inmediatos la comprensién, el sentido de la asistencia reciproca y el respeto mutuo, la ac- cién colectiva lograra la cabal unidad entre nues- tras patrias, indiscutible fundamento de un ideal continental que podemos sintetizar en una América digna, poderosa y feliz. $ ” oY Sefiores Representantes de las Naciones de América: Aqui estén expresados nuestros sentimientos venezolanos. No nos consideramos autores de nue- vas doctrinas panamericanas. Tampoco pretende- mos imponer normas continentales ni abrogarnos la exclusiva de ser ductores ideolégicos de Amé- rica. Tenemos claro sentido: de que cualquier co- mun denominador para ésta debe ser el fruto del aporte integral de nuestros pueblos y el producto de su deliberacion conjunta. La Venezuela de hoy, como la de los liberta- dores de ayer, solo aspira a ser exponente de confraternidad e incentivo para una obra cuyo cumplimiento no puede ser posible sin el concur- so de todas, Por nuestra parte, los venezolanos estamos empejiados en alcanzar los objetivos de un ideal nacional mediante la transformaci6n racional del medio fisico y el mejoramiento moral, intelectual y material de los habitantes del pais. Estamos su- perando un largo pasado de estancamiento; revi- viendo la fe que animé los corazones venezolanos para las empresas por las que se dieron a conocer y conquistaron prestigio en América; organizando y robusteciendo nuestra economia: elevando nues- tro nivel de vida, y practicando la democracia como un sistema fundamentado en los principios de igualdaa de un pueblo mejor alimentado, mejor instruido, mejor orientado; de soberania que se exprese en Ja seleccién de un régimen de gobierno acorde con nuestras propias realidades y no supe- ditado a doctrinas filoséficas de imposible aplica- cion universal; de un orden donde los dirigentes, autorizados para serlo por su capacidad y honra- dez, conduzcan a los dirigidos, y no sean éstos los que sin la debida suficiencia traten de suplantar a los dirigentes; de respeto a las instituciones constitutivas de la nacionalidad y a los superiores jerarquicos por mérito, investidura o desempefio de funciones; de trabajo como suprema fuente creadora de riqueza, prosperidad y dignificacién; de armonja social que asegure la convivencia de los hombres, de sus ideas y de sus credos, y de li- bertad para lo que no atente contra la igualdad, la soberania, el orden, el respeto, el trabajo y la armonia social, ni menoscabe los propésitos de ha- cer de Venezuela una nacién digna, fuerte y prdés- pera. En el convencimiento de que el mayor aporte de Venezuela a la causa de un ideal continental esta en el logro de los objetivos de nuestro ideal nacional, pensamos que aquél se convertira en realidad cuando los ideales nacionales de nues- tros paises marchen armonizados para el bien de América. Sefiores Delegados a la Décima Conferencia Interamericana: Esta Asamblea es una afirmacién elocuente del espiritu de confraternidad de nuestras naciones. Una de ellas, Venezuela, tiene hoy a honra servir de sede a vuestras deliberaciones, y aspira a que pongais vuestros conocimientos y vuestro sentir de americanos diéfanamente al servicio de América. Os manifiesto la complacencia de los venezo- lanos por teneros entre nosotros y contad con la seguridad de que aqui no encontraréis otra opre- sion que la que pueda resultar de la sinceridad de nuestro afecto y de nuestro ferviente deseo de contribuir a la causa del ideal americano. Sefiores Delegados: Declaro inaugurada la Décima Conferencia Interamericana. SERGE one EL ANGLICISMO EN EL ESPANOL CONTEMPORANEO Con el propésito de contribuir al mantenimiento de la pureza de nuestro idioma, diariamente publicaremos en esta p4gina un articulo del interesante y novedoso Diccionario de Anglicismo del eminente internacionalista y filélogo panamefio Dr. Ricardo J. Alfaro. a CLIPER El término de marina cliper, derivado del inglés clipper, que se pronuncia lo mismo, esta catalogado como castizo en-el libro mayor - del idioma. Denota un buque de vela rapido, especificamente, el de aparejo completo desarrollado hace un siglo por los arquitectos nava- les ‘de Estados Unidos, y caracterizado por lifeas esbeltas, proa levan- taga, altos mastiles inclinados y gran superficie velera. ‘ En la navegacién aérea se aplica por extensién la denominacién clipper a los aviones comerciales de gran tamafio y velocidad, espe- cialmente los tetramotores, y al vocabio espaioi debe darsele en los léxicos esta acepcién adicional, justificada por el uso. : |NUEVO ACADEMICO DE LA LENGUA Por ALFREDO MORENO MENDIGUREN Don Julio Palacios, eminente hombre de ciencia, acaba de ser incorporado a la Real Academia Espanola de la Lengua, como Miembro de Numero. De profe- sion Fisico, ingresa a esa docta Institucién en virtud de la suges- tion de Antonio Maura, que consi- deré que era necesaria la presen- cia de técnicos que propusiesen la introduccién en el diccionario de vocablos que traduzcan los hallaz- gos de la investigacién, especial- mente en el campo atémico y nu- clear, Muy pocos son los hombres que aleanzan el honor extraordinario de incorporarse a una de las Aca- demias que en Espafa operan co- mo adelantadas y vigias del saber humano. Cuanto mas notable no sera el llegar a pertenecer a las dos Academias, y es por esto dig- no de especial encomio el hecho de que don Julio Palacios perte- nece a tres Academias: de Cien- cias, de Medicina y ahora a la Real de la Lengua Espaiiola, sien- do superado en esto solamente por Gregorio Marafién, quien ostenta las insignias de cinco Academias. Tres veces sabio, pues, el doc- tor Palacios es, no obstante, un vivo modelo de sencillez y modes- tia. La brillantez de la ceremonia a la que dié lugar su incopora- cién y a la que asistimos abruma- dos por honrosa invitacién, pare- cia no haber sido notada por él, quien permanecia ausente a todo el ceremonial que en torno a su persona se desenvolvia. La noble casona de la calle Fe- lipe IV vestia sus mejores galas. Alfombrada desde la puerta, don- de los criados recibian a los invi- tados bajo protectores paraguas y hecha un ascua de luz, resplande- cia en las a Sa dapper ninas, la rt le los cabaletoe ets ite Benci- llez del frae con corbata negra de los Académicos. Las amplias y hermosas escali- natas que conducen al piso alto, crugian bajo nuestras pisadas con especiales resonancias, como re- cordandonos, a cada paso nuestro, el nombre de uno de los grandes literatos, historiadores, poetas, fi- ldlogos, periodistas, dramaturgos y cientificos que por ellas han dis- currido en el devenir de los siglos desde que fué fundada por Felipe V, que en magnifico dleo preside el salon de actuaciones publicas. La concurrencia, puesta en pie, saluda la aparicién de los seno- res Miembros de todas las Acade- mias que concurren. Para quien es capaz de sentir la emocién que produce la presencia de los hom- bres que con su pluma o su pala- bra tejen a diario las maravillas de nuestra habla espafiola es éste un espectaculo que trasciende al corazén y al espiritu. Alli estan, a poca distancia de nosotros, luciendo sus calvas vene- rables o sus encanecidos cabellos, curvados bajo el peso de la edad o erguidos aun por la fuerza del al- ma, don Ramén Menéndez Pidal, el de las monumentales investiga- ciones romancescas y 1a Historia de Espaha; don Julio Casares enri- quecedor permanente de la Len- gua; José Maria Pemaén, mago del bien decir y dramaturgo Imponen- te; Gerardo: Diego, poeta exquisi- to; Eugenio D’Ors, filésofo y cri- tico insuperable; Juan Ignacio Lu- ca de Tena, periodista y autor tea- tral; Wenceslao Fernandez Flo- res, humorista original; Cossio,in- superado comentador de.la Fiesta Brava; Fernandez Almagro, Fer- Una Momia Sobre El descubrimiento de la tumba de un Faraén muerto hace cinco mil afos, puede que agite mas a Egipto que las subitas alzas y bajas del Presidente Naguib. Como se retordara, uno de los grandes acontecimientos del mundo en 1922, fué el descubri- miento de la tumba de Tutanka- mon o Tutankamen, Faraén del siglo XIV A. de J. C. ¥ Hombres de ciencia del gobier- no egipcio, aun no estan conven- cidos plenamente, pero creen que han encontrado la Piramide In- clusa del Rey Sanakht, de la ter- cera disnatia. El descubrimiento se hizo cer- ca de Sakrata, y quizds pase al- gan tiempo antes de que los ar- quedlogos leguen al corazon de la Piramide y determinen lo que hay en su interior. No se espera encontrar, por supuesto, la riqueza hallada en la tumba del joven Fara6n Tut, cer- ca de Ghaza. Sanaxht, si el se- pulcro es realmente el suyo, rei- né en una época mucho menos opulenta que la de su infortuna- do colega Tuttankamon. Pero si los excavadores dan con una tumba intacta, harén uno de nandez Ardavin, Reus, Martinez * Kleiser, el Padre Zaragueta’ y tan- ~ tos otros que renhunciamos a enu-’~ merar. En ‘este marco solemne, y den- tro de la sala de frios marmoles, abrigada por 1a tibieza de la cale- faceion artificial, hizo su ingreso el nuevo Académico, acompanado por los dos tltimos recipendarios. Inicia Palacios su discurso, agra- deciendo el honor y expresando que no sentia enyanecimiento al- guno por cuanto no era a él como literato 0 escritor que se le reci- bia sino como a representante de la ciencia, pretendiendo reempla- zar al gran Esteban Terradas, a cuyo fallecimiento debe la vacan-.. te del sillén que pasa a ocupar. Las miradas escrutadoras, seve- ras y comprensivas de los anti- guos académicos, bajo el cuadro de Cervantes que preside sus de- liberaciones, acompaian a Palacios mientras se interna en el tema de su discurso sobre Definiciones de la Fisica en el devenir del tiempo, tema que no obstante su contenido cientifico, fué levado con agilidad y fluidez tal, que el publico con- siguid seguirlo atentamente y en- tenderlo hasta donde era posible a los profanos. Revelé como la Fisica es una ciencia que carece hasta hoy de definicién y cité las humoristicas formas como han tratado de orillar - esta dificultad en Enciclopedias famosas como la Britanica y en la casi totalidad de los libros de tex- to, para concluir presentando a la Academia su primera papeleta con la aportacién que hace de su defi- nicién de la Fisica y que nosotros recogemos: “La Fisica se propo- ne descubrir y dar forma matemé- tica a las leyes universales que re- lacionan entre si las magnitudes que inievienep. an los fenédmenos _ Teales.”" _ 5 yh AL El Almirante don Estra-. - da respondié al discurso del re- cipiendario leyendo una_ preciosa oracién, que comenzé por recordar » el origen. modesto, pero hidalgo, de su nuevo compafiero, a quien. una circunstancia fortuita arran-. cé de su pueblo natal, en el que quiz4s estuviese destinado a las + faenas de la agricultura o a las de la ganaderia. Mencionéd como el ser el mayor de nueve hermanos, _ no fué ébice para que Palacios frecuentase la escuela y la Uni- versidad gracias a las becas y ma- triculas de honor que su talento conquistaban. Palacios fué el Catedratico mas joven de Espafia, después de don Marcelino Menéndez y Pelayo, ga- nando, como es natural, su Cate- dra, en Concurso publico. Su contribucién al estudio de Ja energia atémica y ahora la apli- _ cacién de estos estudios al trata- miento del cancer, le han concita- do general admiracién y le valen hoy el respeto y la veneracién de todos cuantos ven en él al sabio, y como no podia ser de otro modo, , al hombre bueno y sencillo, que se impone por la inmanencia de su bondad y nunca por las sutiles artes que usan los falsos valores. Cuando. don Ramén Menéndez Pidal colocé sobre su pecho la medalla gloriosa y ennoblecida de Miembro de Numero de la Real Academia Espafiola de la Lengua, tuve la sensacién de asistir al ac- _ to trascendental de la consagra- cién de un hombre, rodeado. por quienes, tanto como él, poseen ya un lugar en el templo de los in- _ tales. a Lisboa, 1953 la Politica Egipcia los grandes descubrimientos ar ~ queolégicos de nuestro tiempo. El] descubrimiento de la tumba de Tut en 1922, por Lord Carna- von y Howard Carter, did co- mienzo a una serie de ocurren- cias dramaticas que se sucedieron ~ durante afios. Afios levé el em- pefio de terminar las excavacio~ nes y de catalogar cuidadosamen- te los tesoros, que en su mayor parte pueden verse hoy en el Museo de El Cairo. También tuvo su parte tragica el descubrimiento, y hubo quie- -- nes vieron en ello la ira de los antiguos dioses ‘egipcios. Nueve-~- de los hombres que participaron - en la exploracién fueron murien- _ do, uno a uno, en forma peculiar , ma de un’ mosquito venenoso. Richard Bethell, que fué secre- tario de Carter, murié en cunstancias extrafias. En la ma forma perecieron el sor canadiense que hizo la grafia de la momia, y otros dos’ hombres que participaron en el. descubrimiento. En los mismos dias, el pa (Continiia en la Pagina 6 Col. 1)-~

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