El Sol Newspaper, December 19, 1958, Page 3

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Viernes 19 de Diciembre de 1958. Pr e paren ENFERMEDADES: ESTOMAGO - ULCERAS VESICULA BILIAR - HIGADO Por continuar sufriendo de los molestos síntomas de Eructos, Acedias, Gas, Agruras, Acido; Vómito; Latido? Cuando las famosas y gon Pueden ayudarle a res. taurar su salud y felicidad! creadas para beneficio de todo el sistema, sanando las partes afectadas y proporcio- nando así alivio rápido sin doloroso tratamiento de oficina Y con nuestro tratamiento natural de yerbas. Las yerbas naturales del Dr. Bettner, purifican, limpian restauran la función normal del estómago, hígado y el gas y bajando la presión de sangre. No cuál sea su mal, hay un remedio herbolario para EXAMINACION DE RAYOS X, A MUY BAJO COSTO, SI ES NECESARIO. Dr. D. R. Bettner N. D. 1137 West McDowell Rd. PHOENIX, ARIZONA TEL. AL 2-0541 OS FE el AN CIRCULACION POBRE.— Si síntomas de |ler- ¡Tágase una examinación : ro — Se habla español — Esta clínica está especial- Abierto diariamente de mente equipada para diag- 9:00 a 6:00 P. M. nosticar y tratar las condi- Marte: ciones arriba mencionadas A y muchas otras no mencio. nadas! —Se aceptan Casos Domingos: Industriales o Aseguranzas. de 2:00 a 3:00 P. M. MORTENSEN - KINGSLEY LA AGENCIA DE FUNERALES PREFERIDA DE LOS MEXICANOS Se atiende con respetuosa actividad. ARIZONA Public Service estará cerrada el DIA DE NAVIDAD En días de fiesta o fines de semana, para servicios de emergencia, consulte su libro de teléfonos. Roddy Nloundl” e TODA CLASE DE TRABAJOS DE IMPRENTA "EL SOL”” 62 AL SUR DE LA CALLE TERCERA TELEFONO ALpine 3-4948 PHOENIX, ARIZ. ¡FELIZ * NAVIDAD! « al estilo del oeste... 4 y “EL SOL”, SEMANARIO POPULAR INDEPENDIENTE La Cabeza de Pancho Villa Por el Ingeniero ELIAS L. TORRES, (primer gestor para la rendición del guerrillero del norte) (Este magnífico libro que trata de la vida, muerte y hazañas de Pancho Villa, está de venta en “EL SOL”, 62 S. 3rd. St.) (Continúa de la —“¡Qué barbaridad!.... ex-P clamó Villa, desde hoy ten. drán estos niños mucho qué comer; mande usted al cuartel general una lista de lo que necesite para todo el mes y daré orden que se lo entre- guen de donde lo haya.... no me gustan los conventos, ni las monjas; pero quiero a los niños que son los “hermani- tos” del mañana y no voy a dejar que se mueran de ham- bre”... No obstante el odio que sen- tía por los americanos su pri- semana pasada) guerra, por supuesto— era su- perior a él en saber. Un día se presentó en la es- cuela con una gran cantidad de caballos ensillados, que de- jó fuera y él entró a la escue- la; todos los niños se pusieron de pie para saludarlo, se guar- dó silencio y entonces él dijo: —-““Bueno, maistro, me voy a llevar a los muchachos un rato y pueque lo mismo vaya a hacer todas las mañanas; o de cuando en cuando, porque usté nomás los está enseñan- mer pensamiento cuando se|do pa políticos y yo además tratabade ayudar a los niños era enviarlos a los Estados Unidos para que se educaran. —“No crea usted” me de- cía una tarde en Canutillo “si yo pudiera mandaría a todos los niños pobres a estudiar y educarse en los Estados Uni- dos, que entraran a las fábri- cas enormes que ellos tienen, que vieran los secretos de sus industrias que se educaran co- mo ellos; porque como nues- tros hermanitos son más va- lientes que ellos y más vivos pronto aprenderían “sus ma- ñas” pa los negocios pa las industrias, pa la guerra y en- tonces me reía yo de los grin- gos... o se reirían mis mucha- chitos si yo ya no vivía....” Una de las primeras preo. cupaciones de Villa cuando le enregamos Canutillo fué ins- talar una escuela; de manera que por conducto mío, de Tri- llo y de otros después, se pu- scen contacto con el Lic. Vas- concelos, que era el Ministro de Instrucción Pública y ob- tuvo desde luego todo el ma- terial necesario y profesores de ambos sexos que se trasla- daron a la hacienda mencio- nada, en donde ya Villa ha- bía acondicionado el local ne- cesario. Solía por las mañanas pre- sentarse, de vez en cuando, en la Escuela y tras de la algara- bía que se armaba por su pre- sentación, entre los niños, gustaba de escuchar parte de las clases y ver los progresos que iban realizándose en ma- teria de enseñanza, entre el apretado grupo de alumnos que tenía el plantel. Se exta- siaba escuchando al profesor y seguramente pensaba, como aquel hombre tan insignifi- cante —insignificante para la los quero pa hombres”... y fueron saliendo los niños y montando ;a caballo; los lle- vó por los alrededores de Ca- nutillo, dándoles clases de e- quitación. Los primeros días eran simples paseos, después ya galopaban y luego, era a- quel ejercicio una verdadera carga de caballería en direc- ción de algún grupo de árbo- les, en donde desmontaban pa- ra almorzar a la sombra re. frescante. Estos ejercicios no eran fre- cuentes porque el trabajo e- norme que tenía Villa y' la multitud de asuntos que tra- taba en la hacienda le impe- dían hacerlo diariamente co- mo él hubiera querido; pero pronto aquellos muchachos, hijos de campesinos, para ¡ quienes el aprendizaje de la equitación era más fácil, eran unos verdaderos jinetes. Ha- bía allí algunos, como su hijo Octavio, que corría carreras formales con él y saltaba des- filaderos y obstáculos con la misma facilidad con que el pa- dre lo hacía. Yo presencié varias ocasio- nes esos ejercicios en los que era enorme el entusiasmo de Villa, que parecía que veía en aquellos chiquitines, alegres y gordiflones, a los futuros Je- fes del ejército mexicano. En una ocasión, que el objetivo de la carga de caballería fué el molino de Canutillo, cuan- do nos sentamos bajo la som- bra de los corpulentos árbo- les que allí había, me dijo Vi- lla: —-““¿Qué le parece Ingenie- ro? Dígale a Don Adolfo y al señor Presidente que aquí es. tá el criadero de muchachitos pa pegarles a los gringos”... Entre los incidentes curio- sos que se registraron en la escuela, me acuerdo que un día, a fines de septiembre del 22, cuando se estaban prepa- rando algunos números litera- rios y musicales para celebrar el onomástico de Villa, uno de los chiquillos de la Escuela, que se decía era hijo de su|/ PAGINA TRES La Mision de los Padres En tu trabajo tú no verás los frutos sino en la vida de tus hijos. Te guardarás de los amigos que pueda perjudicar- los y sólo conservarás los que puedas acoger en tu casa sin peligro. Tus placeres los regi- rás por los deseos y las nece- sidades de los tuyos. Nunca más tendrás caprichos, y esa imaginación, con la que te re- creabas de joven, no estará bien que la exhibas como un espectáculo a los que debes servir de modelo... Evitarás hacer muchos proyectos y a- prenderás el arte de la vida aventurera que es la de im- provisar; tus más pequeñas gestiones serán dictadas por la utilidad de tu mujer y de tus hijos. Y todo esto con una alegría verdadera como el vi- no tónico, al principio un po- co amargo. Muy probablemente serás pobre porque serás rico de hi- jos. El trapista se levanta a medianoche para cantar la gloria del Eterno; el padre de familia nutrida, en las horas El i ) y / ls ASCII A E AS ES de descanso, se levantará tres, cinco o seis veces, porque un niño tiene catarro, porque o- tro tiene fiebre, porque aquel grita o tiene arco ojival enci- ma de él para recordarle que su pena es un salmo. Buen esposo, pierdes el de- recho de manifestar tu mal humor; no te está permitido sentirte abatido, porque tu a- batimiento se reflejará inme- diatamente en todos los tuyos; eres hasta la muerte, un es- pectáculo que ofrezcas de tí mismo sea bienhechor a los que amas. En el momento en que quie- ras leer a tus poetas, tendrás que inclinarte sobre proble- mas de aritmética, sin confe- sar que nunca has compren- dido de élla gran cosa; y do- minando tu repugnancia, de- clararás que la álgebra es un sport de lo más fascinante. A lo largo del día te encon- trarás con que no hallas tus tijeras, tu estilográfica, tu re- gla; te romperán muchas co- sas que tú pensabas conser. a JUNE y FRED MAC MURRAY dicen: *: Hagan esta Navidad lá mas delle Ls ol ¡den a ella una cocina automatica de GAS! var.... Encontrarás textos im- portantes borroneados con garabatos. Telefonearás en el barullo; escucharás con la sonrisa en los labios cinco o seis preguntas a la vez. Se dirá de tí que no has triun- fado, pero habrás dado a Dios y a tu patria, hijos buenos, de corazón recto. Durante treinta o cuarenta años llevarás esta ruda vida, sabiendo de antemano que tus hijos no guardarán sino un débil recuerdo. Pero en el fondo de tu corazón tú cono- cerás ese sentimiento que es la paz, ese sentimiento que ha de estar de acuerdo con el Maestro de la vida, con el ú- nico verdadero Padre, cuya lección has aprendido; es ne- cesario que ellos crezcan y que yo disminuya.... Y aún cuando el mundo no sepa nada, tú serás el hombre que Dios esperaba de tí y po- drás envejecer en la amistad de tu Creador y en la espera de su amor. e SE COCINA MAS APRISA, MAS FACIL Y MAS FRESCO! nando. Nada de molestia por demasiado calor. Nada que so- No hay qué esperar el gas—déle vuelta y está usted coci- ; E brecaliente la cocinera o la cocina! Y cada pulgada de la es- tufa de Gas es, además, una garantía de limpieza. pia escuela. Enterado el gene- ral de lo sucedido, cogió al ni- fio y le administró dos o tres golpes por vía de castigo. Entonces sucedió lo incon- cebible: el niño que se llama- ba Francisco, por cierto, se le hermano Hipólito, le pegó una || pedrada a otro niño en la pro- | ; Este año, haga SU tarjeta de Na- vidad el fabuloso número de Di- ciembre del “Arizona Highways” enteramente a colores .. . y esté seguro de incluir uno en cada uete de regalo que mande fuera del Estado. 5" ARIZONA AT YOUR FAVORITE NEWSSTAND o HIGHUWAYS encaró a Villa y le dijo: —“'Si me vuelves a pegar le voy a prender fuego a esta casa y a quemar a todos los niños y hasta el maestro”... Estas frases las acompañó con señales de ira profunda, cerrando los puños como si se tratara de pegarle a Villa, Es- te soltó una carcajada y co- giéndolo del cuello le dijo: —““Ahora vas a mandar el asalto de caballería y tras de (Pasa a la página 4) > E > A A AA p Ú // Y Ñ LOS CONTROLES AUTOMATICOS LE QUITAN LOS APUROS! Los quemadores automáticos de arriba evitan que se queme la comida; termómetros para la carne “cuidan” el rost; los rotiseros remojan automáticamente la carne. LOS FABRICADORES MAGICOS DE HIELO DAN TER- MINO A LA MOLESTIA DE LAS CHAROLAS DE HIE- LO—hacen cubos automáticamente; no hay charolas que llenar ni qué desocupar, no hay la molestia de sacar el hie- lo! Y es un refrigerador de Gas que les traé este Fabricador Mágico de Hielo! ESTA COCINA LE AHORRA DINERO DURANTE TODO EL AÑO! Los implementos automáticos rápidos de GAS cuestan menos para comprarlos, instalarlos y usarlos! No hay extras de instalaciones costosas antes de que usted los use, tampoco! Y los términos largos garantizan ejecuciones de las que puede depender, y ahorro para mantenerla. ARIZONA a a Public Service YOUR LOCALLY MANAGED TAXPAYING UTILITY mejor en > > TV: “Playhouse 90” CBS-TV XA AAA >

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