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sl. Mieres: da Melo de leia de 1950. SECCION DE CONSULTAS PARA LA MUJER DESESPERADA — La deseperación es una mala con- sejera, amiga. No siempre la solución de nuestro problema se encierra en la eliminación del dolor; existen cosas en que la solución es dolorosa y entonces precisamos de valor para soportarla. El destino suele asentar golpes a mansalva, que nos es imposible evitar por imprevistos; en el caso de usted ha ocutrido esto precisamente. Usted ha sido herida artera- mente por una fuerza superior e incontrolable cuando me- nos lo esperaba; tiene que ser fuerte ante lo irremediable, tratando de llevar a su corazón la ayuda que el razonamien to presta en estas ocasiones. Si ustedes hubieran sospecha- do siquiera el viaje que aparta siempre al hombre amado de su lado, sus últimas entrevistas se habrían manchado de amargura; así, por el contrario, fueron penas de felicidad. Cual si el reloj der tiempo hubiera sido detenido milagrosa- mente en campo del amor; como si su pasión hubiera sido atrapada por la acción de una cámara fotográfica e inmo- vilizada de pronto en una de sus más bellas escenas, quedó en la:mente y en el corazón de ustedes estereotipado, eter- nizado quizás, un dulce, un bello recuerdo, libre de toda sombra.Por otra parte, amiga, tiene usted en medio del do- lor que la abisma, una ventaja que para sí hubieran queri- do muchas mujeres a pesar de su alto precio: El no la verá envejecer; no sabrá de sus primeras canas ni de sus prime- ras arrugas; la conservará siempre joven, siempre alegre, burlando la acción tiempo. La manifiesta sinceridad de su dolor, me impide insinuarle siquiera la llegada de otro a- mor; pero no sólo por ese camino puede llegarse a la felici- dad; la paz espiritual es una felicidad quieta, quizás un tan- to triste, pero una felicidad al fin. Vaya usted hacia ella por medio de una intensa ocupación física y mental que le im- pida pensar, que le impida sentir hasta donde es posible. Lo demás, lo hará el tiempo. MADRE DESCONTENTA — El poder del amor, seño- ra, es superior a las fuerzas humanas y se las agencia per- fectamente para saltár más altas murallas y pasar al través de las rejas más fuertes y espesas. No es pués, el amor, lo q” debe usted intentar prohibir a su hija, sino el depositarlo en MEE ii PETIT, -ZAPATERIA PABLO CALDERON 145 al Este de la Calle Madison Servicio en Composturas de Calzado. .Personal Competente MEDIAS SUELAS DESDE $1.25 a $1.15 PABLO CALDERON, Propietario. COPACABANA Club situado en esquina de Jefferson y Calle Tercera Tardeada Todos los Sábados y Domingos desde las 2 P. M. 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Encamine sus actos, vigile sus pasos, no como un guardián de los cuentos que inspiran miedo, sino como una verdadera amiga de todos los tiempos, ante quien ella pueda abrir su corazón libre- mente, lo mismo ahora que es una adolescente, que mañana cuando ame, que más tarde, cuando haya formado un nue- vo hogar. Este es el verdadero papel de la madre. ANGELITA — No dudo un solo momento de que su dolor sea tan grande como me d'ce, sobre todo cuando, co- mo presumo, juega una considera'le parte en ese estado an- gustioso, su amor propio. Pero, cuando un hombre declara E una mujer abiertamente que ha dejado de quererla, ella Ino puede hacer nada que no sea retirarse inmediatamente y |para siempre, cueste lo que cueste. No debe usted buscarlo, ¡ni llamarlo por teléfono, ni nada. Todo sería contraprodu- ¡cente para usted; déjelo que se vaya, vuelva sus pasos hacia ¡Otro rumbo y deje de llorar; las lágrimas nacidas en el fon- ¡do mismo del alma, no todos los hombres las merecen. La invito cordialmente a que venga a verme a la redacción; quiero invitarla a que me acompañe un día a visitar uno de esos centros de dolor humano que son desconocidos para la mayoría de la gente; el mar de amargura que ahí se obser- va, hará sentir la suya pequeña y remediable. Quizás se in- terese tanto por el dolor ajeno, que voluntariamente se o- frezca a ayudarme y ello le sirva de lenitivo y olvido para su propio dolor. MARIA — Hable usted seriamente con su padre. Su autoridad no llega a tanto como para obligarla a soportar el constante mal trato de su madrastra. Dígale terminante- mente que desea ir a vivir al lado de la hermana de su ma- dre muerta. Si él tuvo efectivamente derecho para rehacer su vida, no lo tiene para arruinar en esa forma la de usted. No haga valer su mayoría de edad, sino en caso verdadera- mente necesario, pero sí ponga en sus palabras la suficien- te dosis de energía y decisión. MARGARITA — Comprendo que cuando una suegra se empeña en hacer honor a su fama, es una cosa terrible, pero es muy peligroso para usted tratar de deshacerse de ella abiertamente. Precisa q” hable a su esposo de las desa- veniencias entre su madre y usted, pero empleando una me- sura extraordinaria y proponiendo la separación en bien de ella. RECORDAMOS a todas nuestras lectoras que la llave del éxito en la vida radica, precisamente, en la capacidad de la persona. No den al olvido la oportunidad de aprender co- mo medio para solucionar sus problemas económicos de su hogar. A las materias ya indicadas en nuestra publicación anterior, tenemos el gusto de agregar aprendizaje de la pro ductiva industria de la juguetería, labores en chaquira y flores artificiales. GUADALUPE — Tenga la bondad de indicarme si la atención que desea para sus niños podría ser la de una guar dería oficial, ya que propiamente no se encuentran en edad escolar. En este caso, usted podría recogerlos por las tar- des, como me indica. Empero su solución. En caso de no convenirle, le agradeceré ampliar los detalles acerca de lo que pretende. ÓN LE DUELEN LOS PIES?? Nosotres esrregimos los Arcos Caídos, Flat Feet, Dedos Toreldos, Ampollas, Callos, Talones Adoloridos. Todos estos males son la causa de: PIERNAS ADOLORIDAS Y DOLORES DE ESPALDA Vean al Dr. Hi. B. Murray, Ph. T. Número 5 al Oeste de Adams Teléfono: 2-1552 FOTOGRAFÍAS PRECIOS ESPECIALES PARA LOS XMAS LA PRIMERA ES Gratis Exhibiendo a “José” de Hollywood | Phoenix Arizona SE HABLA ESPAÑOL Western Studio 331 WEST WASHINGTON STREET Página Tres. 'NO he vuelto a tener ninguna noticia de usted, hasta el re- cibo de su carta de fecha 30 del mes próximo pasado. Diga usted a su papá que puede venir a verme el día que guste a la redacción y otro tanto puede hacer usted. Estoy, como siempre, dispuesta a prestarles ayuda. Corte Este Anuncio y Llame a 3-1406 para q' le den una cita un buen negocio, con viviendas Urbanidad, don de gentes Enseñar al niño a servirse de sí mismo para que más tarde sea capaz de servirse del mun- do en que habrá de actuar, es enseñarle las reglas y usos de la buena educación. No se trata aquí de Jas formas convencio- najss que de ella se derivan, y que se traducen en ob3e:1 119s y cumplidos que no pocas v2ues entrañan felsedad e hipo::osíia; sino de la verdadera urban.dad, q::e, libre de formulismo»s Ícr- zados, crliga a decir de aque livs que la poseen que son “ger. t2s bien educadas.” Li buena educación nada ite- ne que ver con las caprichosas costumbres impuestas ¿or ta! o cuai país y sociedad: tales co- mc partir el pescado con ur cu- chillo especial o tomar el v:so ¡de acterm:nada manera, Cuas qu4> no teren ninguna impur- tancia. Se1 bien educado, tene: don de gentes, es saber vivir y zaber vivir es conocer por experier : la que no estamos solos en a tie- rra y que 1ecesitamos tiatar convenientewerte a los deme, esto es, ser rnoblemente socia bles.. La buena ecucación 10 tora ningún aire de grandeza o d* *buen tono”. For lo contra: i), es mesura, natitalidad, 1u3encia de maneras artificiosas, se ase- meja al buen decir que es cla- ro, preciso, sin afectación ni ver bosidad. La urbanidad —A, b, c de la civilización— debe convertirse en una función tan habitual co- mo la marcha y el lenguajo. Su enseñanza, que no es, en suma, sino una forma de discipiina moral, ha de comenzar desde ia primera edad para que gestos y actitudes, obrando como las pie zas de bien ajustada maquina- ría, se tornen au náticos y O- bren en cualq ..er lugar y ante cualquier perso +1, La buena educación es al es- píritu lo que la higiene es al cuerpo. Así como ésta precave y defiende el organismo físico, aquélla prepara el ejercicio y el impulso futuros del espíritu, coordinando los gestos y las u¿- sore pe orlea en Jos En un ser dominado poz los buenos hábitos, el esví.) u po- A o CLASES DE PIANO ' Profesora graduada de la Universidad. Sra. Berta 1 Montero 763 E. Polk St, — Tel: 2-8185 Phoenix, Arizona E [SE A RESTAURANT Nos vemos obligados a vender de renta baratas. Todo está nue- vo y se vende muy barato. CANARY CASTLE CAFE 2334 W. Buckeye Road O 5 at. de los EE. larca de Fabrica egistrada cn eb rvados esla Bros. Coffee Inc. [drá iniciar sus vuelos sin ser es ¡torbado por movimientos intem- pestivos o vana palabrería. A semejanza del acróbata que, en plena posesión del dominio de todos y de cada uno de los mús culos de su cuerpo, se lanza al espacio en pos del oscilante tra- pecio, bien calculado el isócrono vaivén del mismo, el hombre bien educado podrá lanzarse a los trapecios altos del pensa- miento, del estudio y de la me- ditación. Tal es la+trascenden- cia que para la vida superior reviste la buena educación que, en verdad, nada debiera detener a las madres para iniciar a sus niños en esta enseñanza, en vez de disculpar sus faltas y pospo- ner la corrección de su mal pro- ceder. La urbanidad es una discipli- na. Exige ante todo una buena presentación: sencilla, pulcra, correcta. Al niño debe exigirsele desde pequeño que se mantenga en esas condiciones sobre las que habrá de fincar la noción de su propia dignidad. Para lograrlo, convendrá evitarle las ropas de colores obscuros que encubren el polvo y la suciedad. Mejor será, si es posible, proporcionar- le ropas claras que habrán de llamarlo al orden y al respeto de sí mismo. La buena educación es un vi- gilante que no se cansa nunca, que exigen en todo momento posturas nobles: la cabeza, er- guida, la mirada franca, los pies bien puestos, la marcha ar ¡moniosa, la voz sin estridencias los modales mesurados. La urbanidad es una barrera que impide las explosiones brus pena y de ira. Bien que proteja- mos y respetemos la esponta- neidad del niño, mas tan pron- to como trasponga el límite de la debida corrección necesario 317 E. MADISON | cas de entusiasmo, de risa, de | será llamarlo por medio de un enérgico !no!. La buena educación : permite las discusiones en familia sin que degeneren en agrias dispu- tas, es ella la que, deferente, enseña a dar a cada cual su tur no en la conversación, impide las voces destenpladas y refre- na las expresiones hirientes. Sin enojo cada cual puede expresar sus pensamientos o externar sus sentires, pues la verdadera ur- banidad proporciona un escape a las opiniones ajenas, sabe re- cibir y acoger las ideas de los otros, a la vez que obliga a ple- gar con suavidad nuestras pro- pias convicciones. La buena educación impone al niño una respetuosa sumi- sión a los mayores, El hábito de contestar: sí, papá, sí, mamá, lo lleva a acatar sus mandatos, la seguir sus consejos, a recono- cer su autoridad. Lejos de redu- cir al pequeeño a la esclavitud la urbanidad le impide desper- diciar sus capacidades y sus energías. Para no lesionar la individua- lidad del niño que tiene dere- cho a nuestro respeto, toca a los adultos seguir el impulso del pe queño sin imponerle nuestros pensamientos ni nuestra parti- cular manera de sentir; mas co- mo a toda planta tierna no des- cuidemos darle el apoyo de la vara recta de la buena educa- ción, pues ella es la primera or- ganizadora de nuestros gestos, el primer móvil de nuestros mo dales, el rodrigón que habrá de amparar el florecimiento de nuestro impulso. Madam Rose —PALMISTA — Contesta todas las Pregunas de su Pasado, Presente» y Futuro en Español 4025 East Van Buren Siempre Abierto , Enseguida del Wagon Wheel PAN - AMERICAN PRODUCE CO. (Por dentro de la Marqueta) COMPREN A PRECIO DE MAYOREO: Hojas para tamales— chil 325 E. WASHINGTON SE DAN DIEZ DIAS camote— ajos— cebolla— Todas clase de verduras—Le- chuga— Tomate— Plátanos— Naranjas— Limones... Visiten el lugar y ahorren muy buena cantidad de dinero... COMPREN a PRECIO de MAYOREO LO QUE GUSTEN... 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