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“nuestros colaboradores. Para precio de anuncio diríjase a las ofi- SPANISH PAN-1_JERICAN WEEKLY NEWSPAPER R Published every Friday by J. C. Franco. Entered as second class matter March 20, 1940 at the Post Office at Phoenix, Arizona, under the Act of March 3, 1879. - No nos hacemos responsables de las ideas entendidas por cinas situadas en 62 So. 3rd. St. Teléfono 3-4948. “EL SOL” SEMANARIO POPULAR INDEPENDIENTE Los grandes dolores son el po- deroso acicate para que el alma encuentre por sí sola la expli- cación de ellos, cuando nuestra interrogación se hace desespe- rada ante la aparente mudez de la vida. Por el tormento que sufre, el propio corazón despierta, aca- bando siempre por extraer de la tremenda lección, la purificación redentora que cada sufrimiento encierra. El espíritu de naturaleza eter- na quiere 'cosas eternas. Anhe- Toda subscripción debe pagarse adelantada, y cuando el subscriptor desee que se cambie el envío del periódico a otra dirección, deberá notificarlo y acompañar la suma de 10 centavos. bo: SUBSCIPTION RATES de Per Year $3.00 Six Months $2.00 All out-of-town subscriptions must be paid in advance for at ; least a period of six months. All payments must be made to the Editor. Post Address P. O. Box 1448. Phoenix, Arizona. RUTAS DE EMOCIÓN Por ROSARIO SANSORES LA INGRATITUD La virtud de la gratitud es cada vez más rara en el mundo donde el agoísmo impera. La mayoría de la gente sólo se acuerda de los demás cuando necesita de ellos. Cuando le hace falta una recomendación o necesita un favor. En- tonces, melosamente, llama y finge ser atenta y afectuosa. Saber agradecer los beneficios es una dulce virtud. Porque el que los recibe y corresponde con ternura siem- pre tiene la puerta abierta para una segunda ocasión. El que paga mal encontrará la puerta cerrada si regresa. Y hostil el gesto de aquellos a quienes ni supo agradecer el favor que le hicieron. Recuerdo que, hace años, conocí un raro caso de gratitud. Se trataba de un hombre rico, que ayudaba a todo el que se le acercaba a solicitar-un favor. Pródigo en grado super- lativo, su inmensa fortuna fué mermando con los años. Un día se encontró tan pobre como aquellos a quienes socorrió. Pero había ayudado a muchos jóvenes estudiantes a ter- minar su carrera. Casi todos se habían establecido y a'su vez disfrutaban de: una posición buena. Todos se pusieron de acuerdo para pagar la deuda. Y entre ellos reunían una cantidad mensual que entre- gaban a su bienhechor para que no sufriera estrecheces y Fué así como el anciano pudo vivir sus últimos años sin apuros económicos. Mas este caso es aislado. Porque un noventa y nueve por ciento de la humanidad vuelve la espalda a la hora de pagar. Y aun conozco a mu- chos que fingen no conocer % quien:les prestó ayuda cuando lo necesitaron. Desvían su camino si le ven llegar, temerosos de que les recuerden el favor. Todavía queda gente crédula en el mundo. Gente que cree de buena fe en la palabra de los otros. Y da dinero, fiado en esa palabra. Tal acaba de sucederle a un amigo mío que había logrado ahorrar una cantidad que destinaba para un negocio. Tres personas cuyo trato cultivaba le pidieron prestada determinada cantidad ofreciendo “bajo su palabra de honor” pagar antes de fin de año. El creyó cándidamente en la promesa. Sin documento alguno le entregó a los tres las cantida- des que solicitaron. + Y pasaron los meses. Se fué el año. Y ninguno daba señales de recordar la deuda. Cuando se los encontraba en la calle lo saludaban afec- tuosamente dando pretextos: -- —No me salieron las cosas como pensaba, pero ten la seguridad que, apenas tenga, te pagaré lo que te debo. Las mismas excusas y el mismo resultado. Pero como el negocio que pensaba hacer urgía de dinero, se dirigió a sus amigos para pedirles parte nada más de lo que le debían. Y se hicieron ojo de hormiga. Ahora anda entre abogados buscando el modo de con- seguir parte de ese dinero que entregó tan confiadamente. Y como afortunadamente hay testigos, no tienen más remedio que contar la verdad y ante la amenaza de ir a la E arinidó N (Sigue en la Pág. 4) Fabrica de - Colchones RAY LEYVAS, Prop. e Hacemos colchones nuevos e Colchones con el “spring” por dentro e Colchones viejos renovados por expertos NUESTRA MAQUINARIA ES NUEVA Y MODERNA, DE LO MEJOR! Todo nuestro trabajo es garantizado, contamos con 32 años de experiencia. HACEMOS “delivery” o sea entregas sin cobro alguno Recogemos a domicilio y entregamos colchones gratuitamente. Vendemos colchones nuevos de la fábrica y entregados por conducto nuestro a toda nuestra clientela. TELEFONO AL 3-9228 PHOENIX MATTRESS FACTORY los de continuidad. Vida infini- ta. Amores indestructibles. Arrai- gos que perduren, y palpitación incesante de la vida tangible. Que nada se destruya definiti- vamente. Que nada muera, por- que de la muerte sólo vemos el cuerpo inerte y la materia dis- gregándose. Que el amor no se apague, porque nuestro egoísmo pide que se done únicamente sobre nos- otros. Que el árbol no se seque, por- que nuestra mirada percibe sola- mente las hojas marchitas y el rugoso y seco tronco. Y cuando un ser amado mue- re; o un amor no es nuestro ya, o nuestro árbol ha quedado des- 'nudo, parece que el corazón se rompe, y una desoladora sensa- ción de orfandad nos inunda an- te la convicción de que todo está sujeto al aniquilamiento y a la destrucción. Nos sumergimos - transitoria- enlace matrimonial tes invitaciones. INVITACIONES 1501 Este Calle Adams. Esquina de la Calle 15 A LOS QUE SUFREN Por RASA SELDI. o mente en un plano de ceguedad espiritual en el que acabamos por sentirnos también como se- cos y pertificados ante la certe- za de que nunca más nos dará tibieza el muerto inmóvil; ni se- rá nuestro el amor perdido irre- misiblemente; ni adornará nues- tro jardín la bella flor marchita y deshojada. a Pero el alma: que es de esen- cia eterna y desea cosas eter- nas, sale de su inercia y sacude ese escepticismo frío como el mármol. Desesperada por querer asirse a algo indestructible, se hunde entonces en sí misma. Y ahí, donde el Creador ha escul- pido todas las respuestas y con- densado toda la razón de la vida y de la muerte, encuentra. al fin, que con la dilatación interna que le produjo un desmedido dolor, ha aprendido a sumergirse más allá del cuerpo inerte de la cor- teza rugosa y del amor impal; pable... El deslumbramiento que este hallazgo nos ppóduce, es mara- villoso; porque el mensaje que nos brota de las honduras, nos que - usted lo participe a sus amistades con las más elegan- “EL SOL” SE ESPECIALIZA EN MATRIMONIO Ordene en EL SOL la confección de sus participaciones matrimoniales 62 Sur Calle Tel. AL 3-4948 Phoenix, Ariz. dice, que el muerto vive; que el rosal está internamente pletó- y merece PARA Tercera rico de savia y de vida; y que el amor jamás puede perderse, pues es la única ley que rige so- bre todo lo creado. Un árbol semimuerto puede darnos la suprema lección de vi- da eterna, cuando está su tron- co yerto, y su piel como frente de anciano con arrugas que se- mejan hondas grietas. Con asombro lo vemos, que a los cuantos días, en un milagro- so amanecer, está cubierto de tiernos y nacientes brotes, 'osten- tando frescura y vida. ¿En dónde estaba antes escon- dida esa cascada de hojas .ver- des que han esplendido después? ¿En qué parte del árbol se ocul- taba ese gran pomo de perfume embriagador que aroma el bos- que a gran distancia? Si todo ello queda guardado y condensado en un período de descanso, de gestación oculta, o de muerte aparente, ¿por qué el hombre, ser pensante, dotado de la chispa Divina del espíritu, y capacitado para desgarrar ve- los a la verdad y penetrar mis- terios, había de ser menos que el árbol, y diluirse en la nada y perder su individualidad para siempre? ¿Por qué un puñado de dimi- nutas semillitas incoloras que re- sumen sin embargo, la potencia- lidad de un bosque, habrían de significar. más en la vida, que el destino de los humanos? Penetremos a la vida interna (Sigue en la Pág. 4) Xx El Dia Mas Feliz de su Vida... ...es, sin duda, el día de su | Viernes.19 de Febrero de-1954 : | COMO SE TRIUNFA EN LA VIDA | Por el Prof. JUAN T. GONZALEZ Obra educativa de utilidad práctica que contiene veinte lecciones de la vida diaria.—Esta interesante obra se vende en la librería “EL SOL” 62 Sur Calle Tercera de Phoenix, Arizona. (Continúa) Todos los días retírate a un lugar solitario a la mismá hora si es posible. Haz diez aspiraciones como te enseñé an- teriormente, despréndete de todas las preocupaciones qué puedan distraerte; deja a un lado toda clase de pensamientos que llamen tu atención y procura reconcentrarlo en una sola cosa. En aquello que deseas conseguir, por ejemplo: ¿Quiéres ser rico? “Seguro”. Pues piensa en la riqueza. Cuando ya estés sereno, sin distracción ninguna, con- centra tu pensamiento en lo que es la riqueza. Inmediata- mente ves surgir de lo más profundo de tu pensamiento ideas brillantes; grupos de seres felices que disfrutan en la abun- dancia; hombres que durante el día has visto pasar en auto- móviles aparecen llevando a sus familias con trajes riquí- simos; niños de cabellos blondos juguetean con unos doche- citos graciosos; una sociedad bulliciosa vive y se agita entre joyas, músicas y bailes; la vida, la vida deseada de abun- dancia y felicidad te rodea inmediatamente. Esto te pasa en los primeros días. Continúa diariamente reconcentrando tus pensamientos en ese mismo asunto; pero no más a esa hora, pues el demás. tiempo está destinado a otra cosa. Pronto te familiarizarás con la idea de la riqueza y las comodidades que encierra. Quiérela, acaricia esa idea. Nunca te creas que estás allí, sino considérate que vives afuera, que hay algo que te espera. No pienses que vas pla- ticando con tanto rico, sino que contemplas la riqueza y sus efectos. Hazlo varios días. Un día, cuando ya tengas una idea perfecta de lo que es la riqueza, compara tu situación con la de aquella gente y percibe la diferencia que existe para que quedes impresio- nado de ella. Luego empieza a pensar en el origen de todos aquellos ricos. Imagínatelos pobres y haz un esfuerzo por estudiar a cada uno, procurando saber cuál fué el camino que siguieron para llegar a ser ricos. é Sostén este estudio varios días y toma interés en: ello. Pregúntate cómo alcanzó la riqueza cada persona de tu pue- blo y síguela con el pensamiento. Imagínatela pobre, muy pobre, y luego, cuando comenzó a trabajar, cuando fué for- mando un capitalito, cuando éste fué creciendo y por fin cuando llegó la riqueza. Estudia bien ese camino. Si sabes de alguno que se enriqueció porque heredó, porque se halló dinero, porque se sacó la lotería, porque se casó con doscientos mil pesos, no te ocupes de él, no vale la pena. En este libro no enseñamos a hacerse rico por desgra- cia, sino trabajando. Esta no ha de ser idea que tú has de seguir. Cuando ya hayas conocido el modo cómo muchos han hecho la. riqueza, y que. veas cómo la están haciendo algu- nos, sigue reconcentrando tus pensamientos todos los días y luego imagínate cuál de esos caminos pudieras seguir tú. Si no te gusta ninguno, busca otro que tú puedas seguir, y estudia y sigue buscando. Probablemente gastarás un año, o más, hasta que lo encuentres. Si estudias con cuidado, si te informas bien, verás que todos eran obreros, que todos trabajaban, que todos econo- mizaban y que todos emprendieron algún negocio. De modo que tú necesitas comenzar de la misma manera con un ofi- cio o con una profesión. ¿Cuál será el oficio que te guste más? Piénsalo bien, para eso tienes destinada esa media hora de concentración, no le hace que tardes un año en resolverte. Despacio se anda más aprisa. Cuando hayas encontrado el oficio, acarícialo varios días, por ejemplo, supongo que tú eres un hombre fuerte y esco- giste el oficio de herrero. Reconcentra tus pensamientos y contémplate como un buen herrero, entrándole al fierro con valor y con inteligencia. Cada chispa que salta de tu martillo parece una idea que brota de tu cerebro. La pechera pen- diente del cuello y quemada por el fuego es el traje guerrero con que desafías a la naturaleza. Tun brazo potente domina y enrosca el fierro según el deseo de tu voluntad. El fierro enroquecido: es como tu corazón que encierra un tesoro, el que estás convirtiendo en plata cada vez que lo martillas. Si quieres ser dependiente, administrador, etc., describe Jel oficio o la profesión y viendo qué te gusta, emprende la tarea de quererle. Estudia el lado bueno y el lado malo. Mira si otros, los que tienen el mismo oficio ganan o pierden en él. Cuál es el provecho que se puede sacar. Hasta dónde puede llegar. De dulcero se puede llegar a tener una confitería, una dulcería, que es un gran negocio. De carpintero se puede llegar a ebanista. De dependiente se puede llegar a comer- ciante. z Fíjate mucho en la elección de ese oficio, pues tienes que tomar en cuenta tus aptitudes y tu carácter. Si te equi- vocas en la elección, tu oficio será para ti muy pesado, pues tienes que hacer algo contrario a tu modo de ser. Tu cora- zón generalmente te dice qué oficio te gusta más. Debes sa- ber una cosa muy importante, que por más rico que seas debes tener un oficio que te sirva de paracaídas, porque es el mejor capital. Los hijos del Emperador de Alemania sa- bían cada uno un oficio. Ten fija en la mente la idea de este oficio, sueña con él y luego comienza por pensar en los medios de que te valdrás para aprenderlo. Teniendo ya un oficio, es decir, una manera de ganar dinero, tienes que pensar en el negocio o negocios que tienes que hacer para llegar a ser rico. Pues con un oficio se puede formar un capitalito y pocos son los oficios que pueden hacer a uno rico; pero este capi- talito es la base del negocio que te llevará a la riqueza. Estos negocios se piensan después, puesto que depende de las circunstancias que medien para hacerse, aunque no es malo que en tus horas de reconcentración pienses en todos los negocios que veas, para que te eduques en ellos, sepas hacerlos y los conozcas. Volvamos al oficio. Ten fija la mente en el oficio que escogiste y luego pon los medios para que puedas aprenderlo. Esos medios no son muy difíciles, pues a los jóvenes (Sigue en la Pág. 4)