El Sol Newspaper, January 17, 1958, Page 4

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SNRARARANARANANAN NANA NANANANENANANANAAAN PAGINA CUATRO CONSTRUYEN TORRES DE REFRIGE... * (Viene de la página 3) principalmente en ciertos deshe- «chos procedentes de la explota- ción de yacimientos auríferos. Pero este esfuerzo encuentra la dificultad de la gran sequía que reina en el país, y la prime- ra preocupación del Gobierno de Pretoria es*el abastecimiento en agua de sus grandes centros in- dustriales. Durante 8 meses, la media de * las lluvias es inferior a 2 centí- metros y si las aguas del río Va- al, aspiradas, bombeadas, utili- zadas para múltiples empleos, industriales o domésticos, o lo- gran desembocar en el Orange, este no llega al mar más que durante la estación húmeda, es decir, algunos meses por año. 100 METROS DE ALTURA La explotación de fábricas im- portantes, y sosbre todo de cen- trales térmicas SE el pro- q % “EL SsoL”, blema, pues, de su abastecimien- to en agua, y como el agua es rara es indispensable recuperar y enfriar la que ya ha servido. Entre las soluciones que se han estudiado sucesivamente, la po- ible construcción de torres de refrigeración se ha manifestado como la más eficaz y la más e- conómica. Estas torres, de perfil hiperbó- lico, cuyo diámetro llega a 60 me tros en la base, 36 metros en el cuello y 38 en la cumbre, son o- bras de fábrica importantes pues tos que no miden menos de 100 metros de altura. Su enorme ca- pacidad permite tratar 16.200 M 3.de agua por hora y rebajar 9 grados la temperatura de la ma- sa líquida. Aunque es preciso vaciar 2,600 M3. de hormigón y utilizar 500 toneladas de acero para cons- truir una sola de estas torres, el espesor_de las paredes de cada obra de fábrica es extremada- mente débil: 0 m. 45 en la base con * 1448 % ESCUCHEN Cstares ¿AL AMANECER” Efren ValenZuela LUNES a SABADO de 5:00 a 7:00 A.M. KPOK 1440 Kilociclos rr rivivoividaiieinieie ninia alaban A TD Tn q rn do dt e YA QUEDAN MUY POCOS ¡Apurese! a Comprar el Libro de la Vida de PEDRO INFANTE “Datos Biograficos de su Vida Artistica y Amorosa aecsescccoroscoso Mustrado con Fotografías en cada Página. .ooooo»»=o»o=o El Mejor Retrato del Querido Idolo en la Portada. ES LA VIDA DE PEDRO INFANTE, ARTISTICA, AMOROSA Y DE SU HOGAR. PILLO Dee dre tete P.O. Box 46 ADEMAS ADJUNTO EL CANCIONERO DE “EL SOL”. CON LAS CANCIONES MAS MODERNAS — TODAS LAS CANCIONES NUEVAS LAS ENCUENTRA EN ESTE LIBRO — NO HAY OTRO CANCIONERO MAS MODERNO EN NINGUNA OTRA PARTE! PIDA USTED SU LIBRO DE PEDRO INFANTE HOY MISMO! SI LO HACE POR CORREO, ASI: EL SOL” MANDE USTED $1.00, O PIDALO POR C. O. D. Phoenix, 1 + ROA AO oo noz zoo ze DATA zzz zzz ze Arizona HAGA SU PEDIDO LUEGO, ANTES QUE SE AGOTE. pl SOL”, 62 Sur de la Calle Tercera Teléfono AL 3-4948 Phoenix DE te SEMANARIO POPULAR INDEPENDIENTE Viernes 17 de Enero de 1958. y 0 m 125 en la cumbre. Hace algunos años aún, las empresas surafricanas recurrían, para construir esos inmensos y frágiles “coqueteros”, a los pro- cedimientos clásicos del hormi- gón, lo que suponía la necesidad de elevar en el interior de la torre un verdadero bosque de ar- maduras: Por otra parte, la distribución del hormigón se hacía aún por medio de carretillas que circu- laban por caminos de ronda a lo pisas de los encofrados interio- Tes. Gracias a procedimientos inge- niosos ultimados por los contra- tistas franceses, éstos han logra- do imponerse en el mercado sur- africano y son ellos los que aho- ra son “llamados para construir la mayor parte de las torres de refrigeración en dicho país. La técnica francesa consiste principalmente en utilizar enco- frados trepadores, una torre me- tálica de distribución de hormi.- gón y, finalmente, un sistema de implantaciones circulares. De 1951 a 1956, trece torres de refrigeración han sido realiza- das en Africa del Sur, según es- te método. Habrá dos en Pretoria, dos en Umgeni cerca de Durban, cineo en Vierfontein, dos en Orlando, dos en Johannesburg (central de lord Kelvin). Contando las cuatro obras de fábrica. mencionadas al comien- zo, son 17 torres las que en me- nos de siete años han sido cons- truidas por una de las más im- portantes fábricas de obras pú- blicas en el territorio de la Unión Surafricana. UN RATO DE BUEN HUMOR (Viene de la Página 3) —La de mi mujer. APODO EXPRESIVO El secretario entra en el des- pacho de su patrón, un gran di- rector y productor cinematográ- fico, y le dice: —Ahí afuera hay un tipo que ¡ | pretende que usted lo reciba. ¿Qué quiere? —pregunta el productor. —Dice que podría servirle en alguna película de ambiente a- fricano, porque está especializa- do en introducir el brazo derecho en las fauces de un león. —Muy interesante —reconoce el productor—. ¿Y cómo se lla- ma ese tipo? —Bueno, —replica el secreta- rio— yo sólo “le conozco por su apodo: le llaman “El Manqui- to”. FIDELIDAD DE CUERPO La joven sirvienta escucha compungida la reprimenda de su señora. Esta le dice indignada: —Hace quince días que has entrado erí esta casa y todas las noches has metido de' tapadillo en la cocina a un soldado. ¿Es cierto o no? —Sí señora —reconoce humil- demente la criada. ¡Y lo que es peor! Cada noche se trataba de un soldado distin- to.... —insiste la señora. —Sí señora —se justifica la doncella— ¡pero eran todos del mismo regimiento. CONTAGIO Un loco corre por la calle si- mnlando con todos sus gestos que va manejando un auto: gol- pe de timón a la derecha, golpe a la izquierda, cambio de velo- cidad, brusco frenaje, sacando la mano. El vigilante que maneja el se- máforo le interpela: —¿Qué hace usted en medio de la calle? —¿No lo vé? Estoy probando mi nueva máquina. —¡Vamos! vamos. Váyase a casa —le aconseja benévolo el vigilante. El loco finge que arranca e inicia un imaginario viraje con su no menos imaginario auto. Entonces el vigilante grita colé- rico: —¡Hup! No por ahí. Es direc- ción prohibida! Itching Torture PROMPTLY RELIEVED A doctor's formula—soothing anti- septic Zemo—promptly relieves the itching, burning of Skin Rashes, Eczema, Psoriasis, Ringworm and Atnlete's Foot. Zemo stops scratch- ing and so aids heal-| Y mo tng of irritated skin. .| Milán, en Oslo, en Roma, en Berlín.... Deporte GLORIA Y MISERIA LOS IDOLOS DE BRONCE Por ELADIO SECADES “7 Tomando como fuente de inspiración la vida de los gran- des pugilistas de la raza negra, podría describirse el más be- llo libro de literatura deportiva. El tema es amplio, lleno de gloria, de miserias, de humanas alternativas... Revisémoslo sin llegar a sus mismas entrañas: Sam Langford, ciego; Dix- on, loco; Tiger Flowers, místico; Jackson Johnson, que es el primer boxeador negro que ostenta el campeonato mundial de peso completo, pasa lo mejor de su existencia en el exilio y termina sus días como títere viejo de un circo desvencija- do y trashumante. Otro atleta de color que alcanza la cúspi- de de la lelebridad, el senegalés Battling Sik, apareció ase- sinadó en una calle de la barriada de Harlem, sin que se ex- tremaran las diligencias de la policía para esclarecer-el he- cho, que libraba a la sociedad de un sistemático perturbador de la paz se... coloso del rar pero enfermo de la mente. Son muy pocos los jiellñodis negros que han llegado al ocaso de su carrera en una atmósfera de bienestar absoluto. La regla general es de olvido, de penuria, de falta de dinero y de falta de sosiego. Hace pocos años murió en Nueva York el panameño Al Brown. Estaba recluído en un hospital de tuberlulosos, gracias al socorro de una institución creada pa- ra aliviar la vejez de los grandes atletas caídos en desdicha. Alphonso Theodoro Brown debutó en el itsmo en el año de 1922. En esa misma tierra, la suya propia, colgó los guan- tes para siempre en el invierno de 1944, Ello quiere decir que profesionalmente vivió del boxeo durante veintidós años... Fué campeón de peso bantam y su equipaje de trotamundos sin reposo acumuló etiquetas de las aduanas y de hoteles de' las grandes ciudades de Europa. Al Brown peleó en Paris, en Manchester, en Londres, en Copenhague, en Bruselas, en Sus récords parecen una guía de turismo. Hay una época en que-Al Brown decide la permanencia en la capital de Francia y allí apura todo el néctar de la popularidad ayudada por su figura extraña. Durante el apogeo de su vida atlética, jamás pesó Al Brown más de ciento dieciocho libras, pero tenía los brazos muy largos y medía cerca de seis pies. Desde el Marqués de Queensberry a la fecha son muy pocos los boxeadores que han podido mantenerse en servicio activo durante más de veinte años. Entre esos pocos soldados de Fistiana, figuran Al Brown y cuatro colifloristas más de su misma raza: el primitivo Joe Walcot, Sam Langford, George Dixon y el mo- derno Joe Walcott, el veterano de Camdem que fue monarca de los pesos completos hasta que la vida pesó sobre sus hom- bros como un fardo insostenible. A despecho de esa durabilidad en el joel y bajo las candilejas, Al Brown tuvo una muerte miserable. A su lecho de enfermo ya sin salvación posible llegaban cada mes un subsidio y la limosna de los poquísimos amigos que seguían acordándose de él. Cuando la exaltación de Joe Louis, hacía veinticinco a- ños que no tenía el templo de los pesos completos ni un solo campeón negro. Jack Johnson conquistó el título y el aconte- cimiento fue recibido como una maldición de los dioses blan- cos. Los prejuicios convirtieron al monarce de bronce en gla- diador repudiado y errante, hasta que vino a La Habana para legar el cetro al precio humillante de un soborno del que tan- to se ha escrito. Jack Johnson significó en el retablo del pugilismo una existencia de peregrinación, de vicios, mordió la fruta blan-. ca prohibida y firmó una sentencia de destierro. Viejo, po- bre, humillado, trabajó en la carpa de un circo rodante, has- ta que le sorprendió la muerte en un accidente de automóvil. La derrota de Jack Johnson a manos del vaquero Jess Williard en el año 1915.en Oriental Park, abre un largo ciclo en que el deporte no tiene campeones negros, Imperan los'ir- landeses y los judíos. Durante once años todos los campeones del mundo son blancos y residentes casi todos en Norteamé- rica. Los sufridos, los relegados, los negros, no pueden pasar nunca de la categoría de retadores.... ¡Cómo han cambiado Recuérdese las tenacidad inútil de Harry Wills en pos de la corona de Jack Dempsey. Jack. Dempsey no le teme a la famosa pantera. No puede temerle, porque lo supera en todo. Pero no le da la oportunidad soña- da, no transige con el propócito que en aquel entonces hu- biera significado un récord de ansiedad internacional y tam- bién un récord de concurrencia... Dempsey no hizo otra cosa que seguir la consigna públicamente confesada por John L. Sullivan de no pelear jamás con un negro. Su sucesor, Gene Tunney, no lo dijo, pero lo hizo y así tenemos que el discípulo de: Shakespeare, que se retiró invicto, no se enfrentó nunca a un enemigo de la raza entonces repudiada. Esa persuación de encono muere en Harry Greb, que desde el desplome de Jack Johnson, es el primer campeón blanco que pone en juego el trofeo frente a un retador de co- lor. El privilegiado fue Tiger Flowers, el místico, el inhibido de todos los pecados, el casi santo. La fecha fue la del vein- tiocho de febrero de 1926. Tiger Flowers ganó la decisión de los jueces en doce rounds y mientras la concurrencia lo ova= ciona, él se postra de rodillas, junta los guantes a la altura de los ojos y le da gracias a Dios.... Ahí mismo empiezan a cuartearse los cimientos de la discriminación de que fueron víctimas en épocas remotas Joe Gans Walcott, Dixon, Peter Jackson y tantos y tantos otros.... Pero el tema es largo, no- to que_ha sido consumido el espacio de esta columna y pro- meto que en otra ocasión muy próxima proseguiré la revi- + sión y el estudio de los ídolos de bronce que tuvieron que responder al destino más trágico. La Habana, Cuba, Enero de 1958. INVITACIONES PARA MATRIMONIO, sólo en “EL SOL” - 62 Sur Calle Tercera - | N

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