El Sol Newspaper, July 8, 1949, Page 4

Page views left: 0

You have reached the hourly page view limit. Unlock higher limit to our entire archive!

Subscribers enjoy higher page view limit, downloads, and exclusive features.

Text content (automatically generated)

Blanca Dels .ya. está: aquí y- cortijo: ante todo hay: que: ser hospita=' —La.pondré-en. la.. lario — dida: friamente- Merce. sale«de.los-límites..de la. correc. des. ción, que< son. en mi .casa una —Tu mujer: tiene razón: — de ¡severa. norma, cretó las suegra: —1Se. saldrá cada cuarto de Cuando. Rafa6t: aMría. subió: |horat 'Tú.no.la conoces! Ha si- en dos-saltos -los..viejos do..casado y divorciada cuatro nes en: derechura:.a. su: cuarto;| veces :y e-nRoma. tuvo. el... ras- la suegra«y; la» nuera: se: quedas|go de: ingenio. —la.gente llama ron mirándosez Quizás. por: pri=|ast alas desverguenzas y al ci- mera vez: estuvieron: de- nismo — de«decirme que le gus —-Es» detestable! — taría:casarse por quinta vez.con ró María Beltrán... Rafáél María. —Verdaderamente; para - tf; — Virgen Santísima! que eres tanapegada: a: los. vies|- La:risa clara de 'Mercedes, jos modos: -—- sonrió: con fina» ¡en>el fondo de la cual un ob- ironía — -realmente.es- un: poco|servador hubiese- advertido un exótica. desgarramiento, resonó. en el a- —¿Y+ cómo: habéis: hecho. estajlegre: patio donde los parrones amistad?” — silabieó María; se- balanceaban como colgadu- —Mistres Graham, no: er: a.|ras»de encaje movidas por el miga mía. viento. Esta: risa fué recogida ES ón mistress Graham desde lo A RO ar sin: pedir persiso:.a. pasamnos de madera tallada. —!Oh: my dear! !Qué conten nadie? Pues rro seso, pl te 3 GE diga que parah cer una. ta y qué feliz la: encuentro! semejante -se. necesita. pri dijo désde-el descansillo la ex- ga una, gran amistad contigw y|taniera, bañada, peinada, per- a fumada y más pintada que nun —¿Por,qué: te paras? Con tu] ca; sonriendo .a-la «joven. mar-. hijo. Eso es: mistress Geaham |QUESa. —!Felicisima, mistress Gra- ham? ¿Puede dudarlo? El verla a usted aquí es para mí algo —Pero-. loconsientes. ¿oPr» qu? tam: completamente inesperado, —Pero, mamá, Tú no tiene ¡Que me lelna de-satisfacción. buena memoria. ¿No recuerdas, No supo la+suegra si la nue- cómo mer insististe- el. día: de: (ta: hablaba en:serto o si en el nuestra. boda en aquello de q” fondo de-toda-su fraseologia no hiciera escenas dé-celos?2: [|palpitaba una antipatía geme- ¿No q en que los celos ¡le de-la: que-súbitamente había eran uña cóña: ridícula? '¿Nó. sa'despertado en ella mistress bes que+mi..marido..no está..e, Graham. namorado de.mi y el resonoci.| -—Encantada, querida, encan- miento dé esa certitilimbte es a tada. ¿Y. su marido dónde es- cito del rage rra a.| —Vistiénc:se Acabamos de —¿A qué?.— preguntó María |llugar de las terra. Una excus Beltrán, con” centelleos de cóle:|sión. ra en la mirad; —'!Magn'ticu! Haremos mu- — A butcar en amor donde le |chas no?. !C/mo me gusta Es- encuentre: paña y cómo úeseo- correr por —¡Qué inmoralidad! Un hom jestos campos! En seguida qu2 bre casadó: no: necesita: Medina: me- dijo que: estaban el amor en ninguna parte: Tán:justedes en: Córdoba, hice. bona: to peor si no.lo.encontró en su|proa. a Cádiz y desembarquf .. mujer, quese aguante; —Medina, ¿iba + con ustedes, —Perdona que te diga que jes el buque? estás anticuada.. y-que-eres in.| —!Oh,.no, my.dear, no! Medi- consecuente. na.me escribió, —Bueno: ¿y qué hago yo de] -—Yh. Muy. oportuno Medina. esa mujer? !'Es horrorosa! —Y' he. venido a.estarme con —No creas. Mistress Graham j|ustedes.muchos días... Hasta q' es muy entretenida. Quizá: Ra-|me echen. faél María se alegra.en-el.fonj| La suegra y la nuera no pu- do de que haya venido porque,|dieron menos que mirarse y la aquí entre- nosotras, ma- parece! mirada que» cambiaron estaba que ya conmensaba a» aburrirse ' impregnada de-la mismz deso. de la idílica tranquilidad. del . ¡lación. Mo mL SUL” SEMANARIO bPuruLas INDEPENDIENTA : Tan pronto bajó Rafaél Ma-! ría, la forastera, acogióle con _trasportes que espeluznaron a- ¡María eBltrán, indignada. no estaba dispuesta la dama a permitir todos aquellos modos a que no estab acostumbrada. Rafaél María, ante el monopo- lio de que era objeto, se sentía en ridículoy violento. Cuando luego del - almuerzo la extran- jera “se lo llevó a recorrer el huerto, quiedas o no, y se que. daron solas uegray nuera, ¡a q estalló: —Bien sabe Dios que si no calle si se|fuera por dejarte sola haciendo de tercero, me iba. —A mí no me causa impre- sión — confesó Mercedes. Pero en su voz había lágri- mas y, lentamente, se levantó y.se subió a su aposento. Alli, de rodillas, con los brazos 'apo- yados sobre lac am, lloró hasta que se cansó. Había salido de Roma huyendo de esta. mujer q' tenía en don de sacarla de sus casillas, ¿y para qué? Para vol “|vérsela a encontrar en la quie- tud del cortijo. ¿Qué hacer .aho- ra? Sutrir otra vez y callar, .ca- llar más que nunca... Pensó en la dulzura del momento soñado el: momento en que amada o no, ella iba a hacer depositario | a Rafaél María de su dulce: se- ereto. Pensó en la dicha del muchacho al saber la. nueva. Casí había saboreado sus vesos —antes de sentirlos— cuando ella le dijese que Dios les iba a enviar un angelito. Y ohara.... No. Mientras estuviese entre ellos esta mujer, no diría nada. | Lágrimas ardientes rodaron por su rostro y así la encontró su doncella cuando entró a. decirla que la esperaban para tomar el té. —¿Qué le ocurre a la seño. ra? !Por Dios! — Se alarmó Marieta. —Nada. No digas nada. Ten- go pena. He llorado... Cada: cual sobre sus osas. —'!Lástima de bomba enci. ma del palo mayor! * —¿Eh? —¿Se cree la señora. que- yo no estoy al cabo de la calle? Quierod emasiado a la señora para no interesarme. Y viene para un mes lo menos. —'!Dios nos asista! —La señora marquesa está furiosa! —¿Cómo lo'sabes? —Me lo ha dicho Laura. —En cambio, el señor estará contentísimo. —!Qué va! El Señor, con per- dón de la señora, tiene un hoci. co de a palmo. Me parece que comol as cosas no cambian, po- co se va a divertir mistress Gra. ham en “Las Golondrinas.” xxx “Como si la contrariedad que padecían fuese un - lazo -dé- u- nión que las compenetrase, ja.. más suegray .nuera estuvieron Hmás: unidas ni más de acuerdo. El hocfeo de Rafaéi María se fué diluyendo en la sapientísi- ma coquetería de la extranjera waiting in line nen you pay bills sf. wait sitiaa) rial as chvvclo book of your: own. Instead, yow<an pay:all your bills.conveniently- and easily —in the comiórt of your own home —simp mailing -checka.- ly by writing and A chocking-acoount protects you, too. When you keep your money in tha -bank and pay. you:khow your cash is safe from loss :bills-by check, or theft. And you'lLheverhaveto pay any bills a second time because youreancelled ebocks are Jégal proof 'of payment. Cóme iand'open a checking account next pay- day. Itecats solittlo for the protection it offers, and for: tio times izouble.and effort it will save you. y r P IN E UOERIFEDURALIOS 0817 LEO CcOoRrRPO VALLEY NATIONAL BANK: ARIZONA A Y == RATION _— > __—___———— —— — —— A hasta el punto de hacer los. dos tun caballero en -la. noche blan- dre -existiesen en un' mundo; nía que calmar las.iras de Ma- ría Bedtrán;, pues perdidas -la- prudencia y el aguante no que- ría nada menos que irse-a Ma. drid con la nuera o despedir con cualquier pretexto a -la-ino- portuna visitante. Ya no se-acor daba de-los-consejus que dió a Mercedes la mañana de su bu- da. ya no la décía que-las -esce nas de celos: eran vulgares y q' debía «estar por encima de ellas Ahora, en sus momentos de desesperación— cuando veía a su hijo alejarse a cabaMo con mistress Graham, después -del almuerzo — era siempre la -mis ¡ma frase la que salía de los-la- bios como un estallido. —¿Y tú- consientes- esto..? Mercedes se- encogía «de. hom= bros, Encontraba- secreto pla= cer viendo indignarse- y rabiar a su suegra. Fero semejante situación no Ppudía : durar mucho. La cuerda juna vida aparte coom si ni sulca del islote, pero él lo dijo: es [ma No: ¡Todavía era Mercedes quien te que Mercedes fué. también una ' mujer decente. Pero ahora....El, como. dijo..muy. bien cierto día, no.-era -un--santo. Solamente. un hombte: ¿Qué podría suceder, Santo Dios? Mercedes se espantaba pen- sando en lo que tendría que ser su. vida siempre con este insa- ciado amor:en el alma y siem. pre con-esta tortura de-los celos apretándole el corazón como du ro torniquete. Por algo estaba tan asustada antes de cosarse. Era como si una misteriosa in- tuición avisárala de tods estos tormentos que la esperaban. Cuando entraron los dos ex. cursionistas.. Máría Beltrán, mi- rólos - inquisitivamente. Rafaél María : venía contento, pero- muy natural, ni turbado ni confuso. Esta pareció tranquilizar a la madre 'y ala-esposa. Pero mis. tress: Graham, estaba: muy: exci : ciones continuas. Se sentaron en las mecedoras del patio, sin se estab poniendo demasiado tirante y se corría el peligro de una. rotuara causada por cual. quiera incidente sin importan-! cia, Este incidente había deve nir por lap rte de María Beltrán ya que Mercedes, con un domi nio absoluto de su voluntad y de- sus nervios — después de una conferencia mediativa : con sigo misma — había de-ididu ¡permanecer en. plan de pasivi- | ¡dad diciéndole juiciosamente que:la visitante se tenía que. ir** ¡un día u otro y que. después el: ¡terreno sería suyo. !Lástima- grande que estos acertados pro- pósitos hubieran. de venirse al suelo un día no. muy lejano! La. marquesa viuda, mujer muy educada y muy. señoril, aparte: muy madura - y curtida en- Jas lHdes del trato social. Es to hacía que sus: relaciones con rmisticss Graham estuviesen matizads de una cortesía: que hacía que el hijo no la pudiese tachar en ningún momento de inhospitolaria o de grosera. Pes ro Mercedes, que iba: conocién: dola bien, se daba cuenta de la hostilidad que latía en :el fondó de esta: frialdad en. que :se- en. volvía cuando se dirigía a la extranjera. Si :ésta: hubiese-sido úna mujer de más fina epider- mis espiritual, no -hubiera tar. dado ni un día en hacer sus ma letas y embarcar en. su :buque; pero. mistress Graham con «una indiferencia insultante, prescin. día de María Beltrán y de.Mer- cedes como si únicamente» hu biese «venido a “Las Golondri. nas” por Rafaél María y todo lo demá,s que no fuese él — personas o cosas— no.le- intere. sasen un comiño, El orgullo aristocrático de la! marquesa viuda, acostumbrada a seleccionar. hasta. la exagera ción sus amistades, ya se hu- bierar esntido bastante con el sool hecho (le tener que.dar en- trada eu su círcul oíntimo a ¡sesta nueva rica extranjera.- cuanto más teniendo quea cep. tar esta especie de postegación a que Ja condenaban las auda- cias de la mistress y la complaz cencia —más o menos sincera— de su hijo. Ella estaba. en -su, casa. El cortijo. era. su. casa. Y estaba muy bien que po. defer encia a su hijo o a«su:nuera a- ceptase a algunas de las amis. tades de éstos; pero nunca que tuviese que admitir un “flirt” de Rafaél María que a. mayor abundamiento estaba. compor- tándose con una despreocupa. ción rayana en la desverguenza —Nada. Esta mujer vive en miz asa Co moen país conquista do,, como si tú y yo no fuése- mos nadie... —comentaba furio- sa, hablando -con Mercedes. El estallido. vino-el áíá:menos ¡pensado y por una causa tri vial en el fondo.. El :arco .esta= ba demasiado tiranta y la cuer da se rompió. Eso fué:todo. Mis tress Graham a la vuelta. dé un paseo: de todo el día, entró ale- grísima en el cortijo. a marque sa. y Mercedes, que:ya' no: velan lo bastante para trabjar en las labores en que se entretuvieran. todal atarde, estaban sentadas en el patio. Habían corrido. la vela y bajaba del cielo el res. plandor color der osa desvaído de un dulce» crepúsculo. Olían: intensamente las jazmineros y galanes de noche. Se. balancea ban los parones-y-las:campani- Mas.. !'Qué maravillosa tarde para. el amor!— pensaba la tris te esposa. Y allá en lo más pro fundo de su corazón; unos celos atroces mardían... El estab con la otra bajo la luz de este cre- púsculo de ensueño,.... en el he- chizo mago de la hora de sorti- legios, la hora en. que se dicen y se conciben todas las locuras. ¿De qué sería capaz .la. foraste ra, desaprensiva y audaz, en es ta hora yen este ambiente? "..... PAP P..€. o o —€—— BP AAA :Rafaél María se mostró como. Isario y se reunían en él toda la servidumbre - y habitntes' en- ge que ni Mercedes ni María hicie fondo de la “cual había algo de Viernes 8'dé Júllesdé 1949. a :que ser decons. Y no=queria“ despecho. He aquí un muro in. hablarte de pg Me habia pro- franqueable para sus planes; estar eligosidad del marqués de Vall de Ebo. Conseguir de un hombre sin religión que se divorciee, no es difícil pero con seguirlo de uno que se tenga por buen católico, es un imposi ble, Frunció el ceño y encendió nerviosamente otro cigarrillo. Al salir de la capilla, Ráfaél María esperó con ánimo de dar el brazo a su mujer. La concien cia le: remordía un poco del a. bandono en que la tenía: desde la llegada de mistress Graham tPobrecilla! Claro está, que 'en el fondo, era ela quien tenía: la culpa.: ¿Por qué no les seguía en sus paseos y excursiones? Rafaél María estaba puesto no décirté una palabra, pero ya no tengo aguante. Has de comprender que es: demasia+ do para:mi'tódo lo que: estoy: aguantándo y>qu+ dé-un día. a otro espero a los Quiroga dé León, con sus hija3, que como os dije vendránap asar un mes - prique. ala nequeña-Je probó mucho el año pasady que vino. con"tu-hermana «y, lá verdad, no quiero que se encuentren aquí con: esa» mujer, .ni muuho:men»s: 'que- presencien .el .espectzculo - de- tu: “fiHrt. Muy elegante; muy moderno, per» muy fuera dex... todo lo «que: estamos acos' tumbrados a. presencia: los Qui toga y:yo. Y: muy:poco edificán resentido]te par las: nifits; ¿Comprendi. de esa actitud de frialdad y. disfdo? tanciamiento de Mercedes: ha cia la mistress. No le parecía correcta ni conveniente. A su- madre se le podía perdonar do; pero Mercedes era una chi. ca moderna que debía compren: | ¡der ciertas cosas y no- darlas —¿Me- déspidés2 : —¿A 11? !'Qué: disparatte, hi- jo! !A tino terdéspide:tu-madre- nunca! !:Para*tí -y> par tu- mu- tada. Hablaba a tontas y a lo»! 'porque tenía ya su edad y esta- jer, es+tódó: lo: mejor” que* hay cas y mareab con sus exclama- ¡ba forjada en un molde anticua dentro ¿der -i0-ast' As quien: hay- ¡Que fletár es asesa :señora.. —No-va aser «fácil; | —Pues: si la-has-de'llevar:dé- sen: lo más mínimo para enta más alcance del que -en- reali-|trás hasta. que-te. pase el':capri- blar un diálogo .que no desca- ¡ban. Y fué Rafaél María quien hizo lo imposible por animar la seunión hasta que al fin vien- do que eran inútiles sus inten- tos, decidió dejar am. ist:ess Giaham que llevase sola. la conversación. En un momento de silencio, se encaró con su imujer. y. preguntó con .cierta .¡Spereza: —¿Has. salido? —No. —¿Con quién había de salir? —- intervino agraiamente la ma dre. — Supongo que ño querrás dar el espectáculo de que tu mujer salga con un criado por;¡ esas carreteras mientras tú.. —Nemá... Fué: Mercedes. Un: tirón de Ja manga la detuvo y la mirada de !a: muchacha era tar. supli- cante que dominó .sn frase vio. lenta prtsta: a. escaparse, —Ya:le dije esta mañana que viniese-con nosotros... — se ex- cusí» Rafaél. 3 --¿Y por qué no fuiste? — in tervino .la suegra. -—Mercedes no quiera nada con nosotros ...siemprs rehusa aceznpañarnos — insinuó Mis. tress Graham con fina ironia. Sencillamente, sin: poner en su tono. la menor malicia, Mer. cedes respondió: —Dan ustedes unos paseus demasiado - largos para. que yo pueda - acompañarlos... Rafaél María no podía supo. ner ni María: Beltrán tampoco —-porque no lo sabann — que +Mercedes se- refería -1 su: cstado "interesante y a. lo -perjudical ¡quep ara ella hubiese resultado montar a caballo durante -a1gu- nas horas. Rafaél María, senc:. Mamente: también, repuso: dad tenían. Pasó su madre por delante- de él, envarada y ceñuda —malo.-|por y aguardó en vano a que su mujerse levantase, pues Mérce=' des permanecía : arrodillada en su reclinatorio conl:as manos cruzadas y los ojos alzados has ta la imagen de San Rafaél, ti tular del oratorio y patrono de Córdoba. Tosió Rafaél María, para darle aconocer su presen. _|cia, pera ella, aunque se estre meció, ni se levantó ni se*-dió por aludida. Entonces 3l, empe lzó a andar hacia el cuarto de; su madre, silbando malhumora do una musiquilla pueril, que evocaba dibujos animados-en la pantalla. La madre le recibió conm uy poco agrado y- casi ni le dijo que ses. entara; a pesar de lo cual, él lo hizo en un vie jo sillón de magníficos cueros que hubiera vuelto loca :a mis: tress Graham si.lo hubiese vis. to, aunque lam arquesa no per- mitiría nunca la entrada de: di cha señora en su.camarín. Era su antipática presencia. —Quisiera pedirte un favor, mamaíta -— comenzó el. joven, (Y estaba terriblemente - cohi. bido.) —Tú dirás. (Con sequedad 'q' quitaba las ganas de- seguir.) —Mistress Graham, ha oídó hablar del baile y conte flamen co y, desearía “Conocerlo.... ¿—¿SÍ.....? Pues que se vaya a. Sevilla y allí la servirán. —No creo que haya necesidad de eso. Se podía dar aquí, en el cortijo, una fiesta. Resultaría muy “chic” y muy... —¿Meterme a mí en casa to. da una tropa de gitanos y. obli. 1] ; —Pues para tu estedo de ner garme a presenciar sus danzas vios está muy indicado el ejer- cicio.. No debías apoltronarte. Mercedes sonrió y s= excusó. —Mamá se queda tan sola. —¿Yo...? —saltó la. suegra?— Te agradezco que te quedes, es decir, te agradaezco la atención pero bein sabe Dios que me alegraría. mucho de que no te quedaras. —Si te molésto..... . —No es:eso,, hija. Yo me en- tiendo..... Se- levantó; incapaz de domi- nar su malestar al ver al a fo- rastera encender un cigarrillo y cruzar una. pierna :sobre otra como un hombre (!en su casa!) por si:no fuera bastante el ver- la vestida con pantalones de y sus jipíos? Ni que lo pienses: De toda la vida he sido poca partidaria de todo eso. —Pues es muy típico. —Lo será; pero a-mí no me gusta y estoy en mi casa y: no tengo por qué imponerme esa molestia. —¿Ní siquiera por compiacer me a mí? —Por complacerte a tQ,. ALaÑo lo hiciera; más como no se tra ta de tí, sino de la cotorra esa; que está fumando abajo... —Ya comprendo queno pues des tragarla... —Lo debiste comprender an- tes de traérmela. —Yo no la he traído. —!Hum! | el único lugar —a más del or1.: torio— donde estaba a salvo de. cho. o. se- desengañe.. —Quiere « que+ la. acompañe toda. Espuña. > apeaesins no-lo. habrás pensado en: sórió... —Tú no- sabes, maná, .lo diz fícil que*'es: par! mi ¿deshacerme: de- estas mujer: sin:. descortesia. . Se trata: dé: alguién. que- tiene enorme" influencia - cn'+ los -círcu. los tivos. —-No<por:su talento, ni::por su- distinción:: —Quizá: será? por: su: dinero. El dinero «es una: gran: palanca, no :puedé «dudarse; aunque para: las. personas espiritualistas co- Mo -tú 'téngan : más importancia ctros: valorés.... Pero el mundo - está - materializando y al-come- to alguna »torpeza las consecuen cias se déjarán sentir en mi ca- na —!Entonces no te la quitarás de encima «nunca! — exclamó» 1» dama; alarmada. Esa... mujer 3e ha encaprichado de ti. Es hirtérica; una ¿oca.... —Probaré a lNevármela a Sevi lia y veré si. consigu embarcar. la en su “yate'”" ¿Y qué harás de ti mujc-? —¿No--. podria: quedarse : con- 1:06 — dijo co1 embarazo evi. cite Rafaób Maris. — Porque- n. va a querer veri: conmig. v, Jaci más, mistror Graham: no lá: h: invitada » ado Claro: nota 13 frialdad de: Mercedes y: está ur poco. resenid:. —¿Resentida?. No.Jo «reas. IMás áspera que estóy yo au to- das horas! Lo que: pasa es que no la quiere detrás. Es un apén oice - molesto:: —Bueno, mamá. Podrias ser | diplomática esta: vez: y dejarme ¡tratar de suavizar la- situación complaciendo. a mistress Gra. ¿ham. —Ni ' canto,: ni; baile; nt juer- gas, ni borracheras en mi casa ¿lo oyes? Y-si..tánto-té- interesa: complacer a esa mujer, lo ha. rás.en..mi- ausentid, na; saldré. para Madrid; —Pero,. mamá... ¿. y: tus iñvi- tados? —Urdiré. una ea. admisi. ble, —No la creerán. Van a resen- tirse | —Pues «les : diré la. verdad... —!Mamá! El orgullo. dé+ Rafaél Márla+ se-encabrtó, resentío de esta ac. titud” poco. conciliadora de. su. montar; y sind ar ninguna ex.¡ —No seas mal pensad. Vino!madre. Se“ cruzaron palábtas cusa comenzó a subir las esca- leras en dirección a su aposen to. Media.-hora después, la. cam panita del oratorio tocaba el ro neral del cortijo. Llamó- a su doncella y la envió con: un re- cado - apremiante: —Dígale al señor marqués q' le esperamos para el rezo. Rafaél María se- sobresaltó al recibir el recado. Estab juito a la amiga, en pie. Ella le había cogido las dos manos y habla- ba-con insistencia lagotera. La doncella oyó todavía como él se excusaba: —Mit .madre:no querrá... Y' no olvide usted 'que mi madre es aquí..la. dueña; que- ésta. es su: casa» y - mi mujed -y -yo:-somos solamente: sus huéspedes. —Departe de la señora mar- quesa, que vaga en seguida, q' éstán esperando al señór mar- qués parar ezar. Vivamente, Rafaél Marga, co mo aquel a quien cogen;en fal ta, se desprendió de la presión de mistress:Grahm. y siguió sin conmentarios:a:la doncella. Era buen cristiano y tenía:a gala continaur las tradiciones de su cas. La forastera le siguió con una sonrisa enigmática en el | ella sin que yo la invitase. —No me harás cvreer que. la invitó tu mujer. —Tampoco. Mi mujer, como tú, no la puede ver. sus motivos? —Dejemos esta . cuestión-. can» dante. Estás dando escándalo - en todo el contorno. La gente sé ocupa de tí. —No hay por qué. Mistress Graham. y yo, no hacemos na- da que ses alga de las normas de la moralidad. —No creo ques ea muy moral, ni muy edificante, ni muy cor. hés, dejarte a tu mujer —estan do delicada de salud, que por algo vinisteis al cortijo — para gue se consumá como una mon ja de claustro entre las cuatro paredes de la csa, mientras tú te vas con esa -. señora a ex- plotar el té:minc. Y la gente flel campo .2: m'y timorata, se da cuenta Ci! tu: ” ¡Cdi —¿Eres tú yut”.e tene en cuenta esas críticas? > —En tratándose de críticos, no hay nada que deba despre. ciarse Todo tiene importancia. A tu mujer la estás poniendo en un situación muy desairaua: y tú te haces ningún favor tar». irreparables: entre los dos y ya no fué nada .el pretexto .del can te y del baile. Ya: fueron otras eozas - de- más «enfunda; Cuando: la- marquesa -le-dijo a: Mercedés” * —¿No te. parece que tendrá. ¡Que se iba. aMadrid-al día.si- guiente, la: muchacha: se- quedó: sorprendida. : —¿Y'me-déjds*soláscon ellus? —exclamó desolada. —Es ¿lo «mejor: que: puedo ha. cer; hija, Si me'quedo, no res- pondo de:mi.' Para: que- Márid: Beltráh; tán: correcta, .1legase'a: provocar una: situación : semejantes. graves. co; sas debian: haber: pasadó.: Mercer des, escuchó;el'reláto:en-un, sli- lencio casi: patético: —Pero -tú. crees” quer RAtáé?. Maríá.- y; esa=mujér.... —murmu- ró aplanadá; —Todos los hombres :son.unos:: neciós. y-adémás: unos simver: - guenzas Sí no.:ló:sablás: te: en> teras' ahora. Yo: hubiera: puesto: las: manos en: el :fdege por este» hijo míó,.y -ya-1o. ves: ; —Yo- no: lo. creo: - Rafaét: Mas ría- es- un. muchacho: décéntes.. ——quiso.. deféndér. la. esposa; poco, aunque seas hombre. Hay | Continuará.» la. semana, entrante:

Other pages from this issue: